DESPUÉS DE LA TORMENTA

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Era medio día, todos estaban haciendo alguna actividad y el azabache solo observaba a la nada, pensaba en lo que había sucedido en la noche. Addison estaba en la cocina preparando una merienda y algo de té, el favorito de doble D.

-bien, supongo que supiste sobre todo lo que hizo tu hermanito-
Addison rio y siguió cortando el pastel que había traído.

-oh valla- hizo un gesto de impresión -¿Qué es lo que mi lindo eddward hizo?-

Ella se giró para verle con una mirada "triste" él rubio sonrió por sus adentro, se acercó tomando un mechón de su morada cabellera y hablo con un tono triste.

-pues veras, se involucró con mi novio, no acepto que yo estuviera con él y después propuso que fuera de los dos ¡¿lo puedes creer?!-
ella solo se acercó rozando su barbilla.

-entonces, tu eres un omega ¿verdad?-
el acento, ella solo sonrió lamiendo sus labios y dándole un ligero beso en la comisura de sus labios.

-odio que mientan, pero te lo pasare por esta vez ya que eres lindo-
Addison le había dedicado una sonrisita como lo hacía cualquier alfa delante de un omega sumiso. Ese se ruborizo molesto para marcharse de inmediato mientras tallaba sus labios.

Termino de preparar la merienda y el té. Entrego su taza a eddward y se sento a su lado mientras dejaba la bandeja con las galleas y pastelitos.

-quita esa cara cariño, come y bebe tu té-
el acento dando un sorbo, después sonrió tranquilo.

-es relajador, gracias addi-
ella sonrió con una gran sonrisa, era lo único que sabía hacer y solo lo había aprendido por eddward.

En la habitación de nat. Kevin estaba aún dormido hasta que escucho el rechinido de la puerta eso lo puso alerta ante cualquier intento del rubio. La persona que entro estaba al lado de él asi que al sentir un roce en la mano, sin ver le, halo dejando a un lado de la cama al "sujeto" mientras este se comenzaba a quejar.

-¡Hey! ¡Me lastimaste el hombro!-
Kevin se rio algo aliviado.

-hermano, sabes que no puedes asustarme asi, lo siento por tu hombro-
el peliturquesa bufo para después reír.

-cierto, olvide que eras bueno en el americano-
el pelirrojo se levantó aun cansado, la jaqueca comenzaba a ser presente asi que opto por meterse a duchar.

-bro creo que antes de hacer cualquier otro movimiento con la dulzura, debes comer y bajar tu resaca-

Nat siguió acomodado su habitación ya que su amigo no había hecho la cama. Camino comenzando a sacar ropa para cambiarse.

-Hey hermano, podrás traerme mi ropa deportiva, iré a correr en un rato-
siguió duchándose y al terminar se cambió saliendo en toalla sin antes procurar que solo estuvieran nat y él.

-¿Qué sucede bro?-
pregunto algo burlón.

-el idiota de tu enamorado-
nat dejo de reír y le dejo la ropa en la cama.

-no me recuerdes, ya me meto a bañar-

Entro al baño y el término de cambiarse. Salio y suspiro antes de dirigirse a la sala.

-bien, andando-

Tomo valor y camino hacia la sala, entro con una pequeña sonrisa pero esta se desvaneció de inmediato. Vio de nuevo a la chica muy cerca de su omega, esta vez no se quedaría callado asi que se acercó tomando de la mano al menor alejando la.

-wow ¿estás bien?-
dijo la chica de ojos zafiros. El alfa solo rechisto molesto.

-se lo que quieres y deja que te ponga en tu lugar-
le miro con esa frialdad, clavo su mirada más en ella.
-no pienso entregarle tan fácil a mi tontorrón a nadie, asi que deja de coquetear con él de una buena vez-

MI ODIADO Y QUERIDO NIÑERO (KevEdd)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora