† Capitulo 1 †

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Noviembre 16:

Gritos desgarradores, provenían del interior de una casa, situada al norte de la cuidad de Washington. El filo de una fría cuchilla, recorría el cuerpo de un pequeño niño lentamente...la sangre carmesí brotaba incontrolablemente,  inundando el frío suelo de la habitación...la madre, horrorizada de aquel pequeño, gritaba e imploraba  por su vida.

---- ¡¡ NOO POR FAVOR, DETENTE!! ---  gritaba la mujer entre sollozos, al ver que su pequeño hijo estaba desangrándose

---No le hagas más daño...vas a matarlo...

Una figura femenina podía notarse entre la obscuridad. La luz de luna reflejada en la ventana; dejaba ver algunas facciones de la joven asesina.

La chica, de tez pálida portaba una larga y alborotada cabellera negra, labios del color de la sangre y ojos esmeralda que  reflejaban locura, cada vez que su cuchilla atravesaba el cuerpo del pequeño infante.

El menor hace ya un rato, que había quedado inconciente e inmóvil, lo que causó que la joven parará en seco, su vil acto.

--- Esto ya no es divertido...--- dijo expresando su aburrimiento.

--- Tal vez deba, quitarle alguna extremidad, para hacer esto más interesante...

--- ¡¡No!!, ¡¡te daré lo que quieres pero te lo suplico, déjalo en paz!! --- grito la mujer al escuchar a la  chica.

Aquellas palabras, lograron captar la atención de la joven, por lo que curiosa, se giró para mirar a la mujer herida, que yacía en el suelo.

---- ¿Lo que quiero? --- pregunto fríamente.

---- ¡La caja fuerte ¿No?!...eso es lo que quieres...¡Vamos ve y tómalo!, La contraseña es 83,44,76,15 --- soltó con desesperación.

--- ¿De qué hablas?...

--- ¡El dinero, tómalo y lárgate de aquí!

Terror, era lo único que reflejaba su rostro...

La chica la miró por unos segundos, antes de hechar a reír desquiciadamente.

---De modo que piensas, que la única razón por la que estoy haciendo esto, ¿Es por el Dinero? --- apenas y lograba pronunciar las palabras a causa  de la risa.

--- No querida, la razón de mis acciones es por mero capricho...

----...Estás demente

Divertida, la asesina atravesó la habitación hasta su víctima; acunclillandose para verla más de cerca.

---- Lo se y creeme esta noche me estoy divirtiendo mucho..así que como muestra de mi gratitud --- apunta  con el cuchillo, al infante que yacía en el suelo --- dejaré al mocoso en paz...si es que sobrevive la noche.

La mujer lloraba y maldecia, su respiración denotaba cada vez más desesperación, no pudo hacer nada por su esposo. El cual horas antes, había sido perseguído y torturado, en el interior de la casa por la asesina.

---- ¡¡ ERES UNA MALDITA PERRA DESGRACIADA!!! --- soltó con furia y Odio.

--- ¡No falta mucho para que la policía llegue, ya veraz te pudrirás en la cárcel!

Para la chica era tan divertido ver aquellos gestos, que no pudo evitar volver a reírse de manera desquiciada.

---- ¿Que vendrá la policía dices?...¿Crees en verdad que serán capaces de atraparme ahora?,  cuando no lo han logrado ¡En 8 años! Si que te gusta hacerme reír.

La asesina, la tomo con brusquedad del cabello, arrastrándola por todo el pasillo, hasta llegar a la orilla de la escalera.

---- ¿Cuál es tu nombre? --- pregunto, al mismo tiempo que la soltaba.

El silencio reino por algunos breves segundos, lo que impaciento a la joven.

--- ¡¡CONTESTA!! --- exclamó furiosa.

La mujer dió un respingo y con voz apenas audible respondió.

--- Dá-maris...

--- ¿¡Eh!?

--- Me llamo Dámaris...

---Bien Dámaris, aún tenemos algo de tiempo para divertirnos, antes de que llegue la policía, así que...que te parece si jugamos el mismo juego que tu difunto esposo. --- dijo esto último esbozando una escalofriante sonrisa.

Los ojos de Dámaris dibujaron terror en su rostro. La chica, pateó fuertemente el estómago de la mujer; rodó por las escaleras, quedando tumbada al final de estas ,con vida.

---- ¡Que esperas, levántate y corre! De lo contrario no será divertido.

Damaris ya sin muchas fuerzas, se  incorporó como pudo, hecho a correr hacia la cocina, desesperada en busca de un refugio o arma para defenderse, de aquel terrible monstruo que rondaba por la casa.

Divertida ante su presa, la joven asesina esbozo una sonrisa llena de locura, al mismo tiempo que jugueteaba con la cuchilla entre sus dedos.

--- Que comience la cacería...---exclamo mientras bajaba lentamente por las escaleras.

Las escaleras chirriaban cada vez que la asesina bajaba por ellas, por lo que para Damaris era un sonido de lo más aterrador, ya que a cada segundo que transcurría, se anunciaba su muerte.

El sonido cesó, lo que la puso de nervios. ¿Que haría ahora?, ¿Este era el fin de su vida?, ¿Podría ganar algo de tiempo, para que llegue la policía?, Esas eran algunas de las preguntas que daban vueltas en su cabeza.

Desesperada, hurgo entre las cosas de la alacena, tomando un cuchillo para su defensa.

Ruidos comenzaron a escucharse nuevamente por la casa, la asesina se encontraba cada vez más cerca de ella.

Una cuchilla salió disparada de entre la obscuridad, quedando incrustada en la pared, cerca de su oreja. Esta comenzó a sangrar, debido al pequeño corte  que le había propiciado la cuchilla.

--- Te encontré --- dijo sonriente --- Un poco más a la derecha y hubiera caído directamente a tu ojo.

--- ¡No te acerques! --- dijo apuntado con el cuchillo a la asesina.

Molesta ante aquella acción, la chica, con un rápido movimiento le arrebató el arma, con la cual la amenazó.

--- Eres ingenua al creer que puedes conmigo...me gustaría jugar un poco mas pero, lamentablemente se acabó el tiempo...

Su sangre se heló al escuchar aquellas palabras, su rostro pálido irradiaba terror.

Sabia que aquello significaba el fin de su vida y aún así huyo ante el vano instinto de sobrevivir...dos rápidas cuchillas, se incrustaron en sus piernas derribandola, antes de que logrará llegar a la salida.

Parada frente a ella, el monstruo femenino, reía con locura; su pecho ardía en furia y tristeza...su fin había llegado.

Un terrible dolor recorrió su cuerpo...

"La bestia a devorado a su presa..."

Fueron las últimas palabras que Damaris escucho, antes de que un infinito sueño se apoderará de ella.

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