13-Problemas en el paraiso

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Narra America:

Finalmente había llegado a casa, pero lo que me encontré fue a un pequeño Jules hecho una bolita en el sillón. Me acerque a el lentamente y pude notar que estaba dormido, sonreí al verle tan calmado. Ese niño normalmente era bien energético, era un milagro verlo de esa forma. Supongo que mi mirada fue demasiada potente, porque comenzo a despertarse y poco a poco comence a ver sus ojos azules.

-¿Am?-Pronuncio con una voz bastante adormilada.

-Hola Jules, ¿Qué tal la sies...-Esa no era una voz solamente de sueño, era una voz algo quebrantada.-¿Qué pasa? 

-Se fue-Susurro-Emily se fue.

-¿Qué? ¿Qué ha pasado?-Pregunte rápidamente.

-Todo comenzó con un mal entendido y luego...ya no estaba aquí. 

-Cuéntame bien...

-Bueno...

Horas antes...

-¡JULES! He estado todo el dia esperando que publicaran un nuevo capitulo de supergirl pero...¿Me estas escuchando?-No la estaba escuchando la verdad, pero mi celular me tenia bastante distraído aunque la verdad jugar al LUDO era mi adicción.

-¿Qué?

-Nada, olvídalo.

-Okey-Se levanto y camino hacia la cocina dejándome en el sofá, no le tome realmente importancia ya que ella solía tener esos cambios de humores. En un momento estaba tan emocionada y luego estaba así, como si perdiera la vida. En su regreso, trajo una taza entre sus manos que por el olor me confirma que es café. Se sentó a mi lado sin siquiera voltear un momento a mi y miro fijamente hacia el televisor. Me acerque y ni bien roce su mejilla ella se aparto. Desentendido la mire y ella me miro sin gracia antes de levantarse e irse hacia su habitación. Iba a seguirla pero escuche como cerraba de un golpe la puerta. Luego hablaría con ella. Pero una hora después apareció con ropa bastante llamativa, lo cual fue extraño y su maquillaje era de fiesta.-¿A donde vas?

-¿Acaso importa?-No esperaba una pregunta para mi pregunta y menos con ese tono que uso, tan tosco.

-¿Por qué no me importaría? WTF.-No respondio a eso solo camino hacia la puerta, me levante y la tome del brazo pero ella se giro safandose de mi agarre.

-No me toques-Chillo.

-¿Qué te pasa, amor?

-No me llames así.-Me dijo, desviando su mirada hacia otro lado. 

-¿Y como quieres que te llame?

-Mejor no me llames de ninguna forma-Se dio la vuelta y salio por la puerta dejandome algo confundido, obviamente no deje que se fuera allí, la seguí pero cuando ya me encontraba afuera supuse que era mejor dejarla ir. 

-La dejaste ir.-Repetí.

-Pero me arrepentí, pero ya era demasiado tarde.

-¿No la llamaste?

-Apago su celular-Mierda, debe estar bastante enojada para descomunicarse de esa forma.

-¿Donde crees que este?

-En una fiesta, no sé. Haciendo quien sabe qué...con quien sabe quien.-Obviamente Emily no haría nada con nadie, ella no era así.

-No puedo creer que no le hayas prestado atención por jugar al LUDO.

-¡Es qué estaba ganando!

-Pero sabes como es Emily, y más si te estaba hablando de Supergirl.

-Si bueno...esa parte puede que la haya inventado porque realmente no la escuche.-Golpee mi frente con mi mano y luego le di un puñetazo en su hombro.-¡Oye!

-No me gusta verles así, ambos son mis personas favoritas y...se que han estado peleando bastante. 

-Eso no es cierto.

-Desde mi punto de vista, están más lejos que nunca. Y no logro entender por qué.

-Ella se aleja.

-Lo sé, Juls. Pero tú dejas que se aleje. 

-¿Ahora es mi culpa?

-Nadie tiene la culpa, asi no es el amor.-Me levante, tome mi abrigo y me dirigi a la puerta.

-¿A donde vas?

-A buscar a Em.

-Suerte con ello-Por alguna extraña razón sabia donde estaba, esa chica era tan impredecible pero no para mi. Camine y camine hasta llegar el lugar exacto, era un banco donde solía ir a leer días después de habernos mudado allí los tres. La vi de lejos, con la vista fija hacia adelante. Era de noche pero gracias a los faroles que iluminaban todo el lugar la podía ver perfectamente. Camine hacia allí y me senté a su lado sin decir nada, me quede en silencio mientras esperaba que dijera o hiciera algo.

-¿Como supiste que estaría aquí?

-Solías leer libros aquí cuando nos mudamos.

-Ya no leo libros hace tiempo, Mer.

-¿Y entonces qué haces aquí? ¿Intentas leer las estrellas?-Pude ver como miraba hacia arriba, sonreí e imite su acción.

-No lo sé, pero tu no estabas en casa y Julian me ignoraba. Pero ahora que me fui lo extraño. 

-¿Y qué haces vestida de esa forma? ¿Ibas a alguna fiesta? ¿¡SIN MI!?-Comencé a dramatizar la situación y ella río negando con su cabeza.-Emilia.

-Mér.

-Si lo extrañas, ¿Por qué no regresas?

-No lo sé, últimamente me ha ignorado o siento que le molesto. Y ya no me sentía bien allí.

-¿Y hasta cuando piensas quedarte aqui?

-Hasta que...descifre lo que dicen las estrellas.

-¿Puedo acompañarte señorita?

-Esta bien.

***

No se como fue que terminamos quedandonos hasta las tres de la mañana alli, fue algo descuidado porque podria habernos pasado algo pero por suerte no sucedio nada. Al llegar, nos encontramos con un chico durmiendo con su cabeza contra la mesa. 

-Deberiamos despertarlo-Comento Em.

-Si pero antes...-Busque rápidamente un marcador y escribí un pene en su mejilla.-venganza.

-Por eso te amo-Ambas reímos y no es como que ambas nos riéramos suave, no. Parecíamos focas atragantandoce con un marisco. Suficiente para despertar a Juls.

-Chicas...-Susurro adormilado.

-Mi trabajo esta aquí hecho, iré a ducharme y espero que cuando regrese esten reconciliados...o teniendo sexo salvaje de reconciliación, eso depende de ustedes.-Camine hacia el pasillo de las habitaciones pero luego me retracte-¡NO ES CIERTO!¡VAYAN A UN MOTEL NO QUIERO ESCUCHAR COMO PECAN SUCIOS!-Sin más salí corriendo de allí.




Ya va a empezarWhere stories live. Discover now