Come with me | Jeff The Killer

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En un bar de mala muerte, una chica de apariencia joven fregaba el suelo mientras que hombres viejos y asquerosos le tocaban el trasero y le echaban piropos denigrantes. Ella ya estaba acostumbrada, además, esas cosas no solían salirse mucho de ahí, y si así fuese, el barman o el dueño del local la ayudarían, como en ocasiones anteriores.

Ella tenía una cara de bebé pero iba vestida como una ramera, por decir algo. Se notaba que originalmente ella no era parte de ese lugar.

Miró el reloj en su muñeca, el cual probablemente sea robado, y vio que su turno acabó ya. Así que recogió sus cosas y se preparó para irse, pero un fuerte agarre la detuvo, suspiró, se dio la vuelta para ver de frente a su asaltante, pero se encontró con un cuchillo a milímetros de su cuello. Vale, eso era nuevo. Cerró los ojos con miedo, estaba aterrada.

Escuchó como el barman, Jimmy, le gritaba que la dejase en paz. Pero el asaltante estaba quieto, sin decir nada.

De pronto se rió, y soltó la mano de la chica para cogerle fuertemente de la cintura, para acercarla a él mismo, aún sin apartar el cuchillo de su cuello. Estaba tratando de besarla. Ella sintió un aliento muy fuerte a alcohol y por instinto giró la cabeza. Su atacante no se detuvo y le mordió la mejilla, ella soltó un grito agudo mientras que las lágrimas empezaban a caer por su rostro.

Jimmy no podía llamar a la policía, ya que corría riesgo de ser detenido, pero no podía quedarse ahí, viendo como atacaban a su compañera de trabajo. Pensó en su mujer. Pensó en que pasaría si le pasase eso a ella y él impotente, probablemente sin tener ni idea de lo que ocurría, con todo el mundo estuviese viendo eso, pero no haciendo nada, solo porque : «Ella se lo buscó.»

La rabia y furia lo consumieron. ¿Cómo es que todos eso imbéciles se quedaban viendo eso como si fuese un espectáculo, y encima animando al joven atacante para que «le dé su merecido» a la chica? Saltó de la barra y les gritó a todos que se fueran.

Eso pareció alarmar al dueño, quien salió de su despacho. Iba a regañar a Jimmy por espantar a la clientela sin razón aparente, pero se chocó de narices con una escena inolvidable.

Jimmy había intentado parar al asaltante pero este le cortó el cuello en milésimas de segundo. Matándolo instantáneamente, dejándolo tirado en el suelo sangrando. El sonido sordo del cuerpo de su amigo chocando contra el suelo le hizo abrir los ojos a la chica, encontrándose con esa escena tan horrible.
Entonces empezó a marearse por la cantidad de sangre que había ahí, y antes de desmayarse le suplicó a Dios que le dejase un hueco junto a sus padres en el cielo.

Mientras tanto, el asaltante reía. El dueño del bar corrió a su despacho, en busca de su escopeta. Pero el joven le siguió y le acuchilló varias veces contra su escritorio, clavándolo a el. Pero un sonido lo alarmó. Se trataba de las sirenas de policía, al parecer Jimmy si hizo lo correcto y llamó la policía. Con No. 1 Party Anthem de Arctic Monkeys sonando de fondo y el local vacío, cogió a la chica al ritmo de la música mientras tarareaba con suavidad. Se dirigió al baño y salió por la ventana mientras se adentraba en el bosque...

Pobre chica.