Bad girl.

18 capítulo

Ya han pasado dos semanas de la llamada del violador de la pradera.

Y aunque no eh podido conciliar el sueño todos estos días, me encuentro con muchas ganas de levantarme de mi calentita cama.

Nah es broma. Nadie se querría levantar de su cómoda cama.

Todo a vuelto a la normalidad, Emma ha vuelto a casa, Jacob está más enamorado de ella que nunca. Bueno mutuamente. Y de Christopher no se nada.
Aunque me gustaría tener noticias de él, Jacob no me quiere contar nada, algo me oculta y no me está gustando nada.

Por otra parte me preocupa demasiado mi madre, hace unos días la notó distraída, y sospecho que está enamorada. No es que no quiera que ella se enamore, es más me encantaría hacerle putadas a más gente de mi entorno, pero me da miedo que le hagan daño como hizo mi supuesto padre, aunque no sepa quien es no se merece que lo llame así, bueno que me disperso, me gustaría saber de quien se trata, me habla mucho de él dice que es muy guapo, que le recuerda a Brad Pitt, que estuvo casado dos veces y que tiene dos hijos, en verdad es solo padre de uno de sus hijos pero al otro lo quiere mucho y lo trata como su hijo, solo porque prácticamente le gustó su madre. Lo peor es que se está enamorando de un hombre actualmente casado.

Es complicado de entender lo sé.

ANA POVS.

Hay una botellas escondidas debajo de mi cama, las escondí ahí para que cuando Heather viniese de visita no se diera cuenta, no soy alcohólica pero de vez en cuando me gusta tomarme mis copillas, además necesito algo que me haga olvidar la llamada del padre biológico de mi hija, que mejor que unas cuantas copas de vino y licor?

Abrí la primera botella, me la acabé y fui por la segunda, ya me estaba mareando un poco pero caminé con cuidado hasta la habitación para coger otra, se me dificultaba la vista, pero en un tiempo de mi vida me acostumbré a ver borroso así que no me es tan difícil, saber cuál es cuál.

Una tras o otra y ya estaba echa una gran mierda. Hasta las agujas del reloj me daban risa, es entonces cuando me llama mi hija.

-Si?- intente parecer lo más sobria posible.

-Ma?- dijo algo extrañada- estas bien?- preguntó.

-Si lo estoy, que necesitas?

-Puedes hacerme un favor?

-Claro

- Puedes venir a casa, necesito hablar contigo - dijo con un tono de voz bastante neutro.

-Y...tiene que ser ahora?- fruncí el ceño.

-Claro mamá- dijo con burla

-Voy- colgué y fui hacía el baño. Me lavé la cara unas cuantas veces, si me ve así me mataría, aunque agua fría no será suficiente, confiemos en mis poderes de actuación. Cogí el coche, me metí como pude. Di un suspiro -Vamos a ya- lo encendí y empecé a conducir.

No estaba conduciendo con un equilibrio de acelerar y frenar, sino más bien con desequilibrio, empecé a dejar coches atrás como si la carretera fuera una autopista, aceleraba todo el rato, mi hija me necesita, y estaré siempre con ella, aunque no sea la mejor madre, siempre estaré con ella.

No dejaba de darle vueltas a la cabeza, pensando lo mala madre que soy y lo podrida que estoy por dentro y fuera, logrando desconcentrarme por un momento.

Se acercaba el paso de peatón , y aunque era un poco difícil ver, no visualicé a nadie pasando, entonces era mi oportunidad para acelerar. Y así cometer el peor error de mi vida.

Escuché un chillido que me hizo frenar rápidamente, y lo peor fue ver pasar volando a una persona por el cristal de mi coche. Como si lo viera todo a cámara lenta.