Un día normal

205 10 7
                                    

El día transcurría normal, los smashers descubrían distintos rincones de la mansión a medida que avanzaban por el lugar.

Red y Leaf, junto a sus Pokémon recorrían los pasillos del lugar.

-¿Qué encontraste Charizard?

El Charizard de Red hizo un ademán para que lo siguieran y así lo hicieron, hasta que llegaron a un largo pasillo.

-¡Las habitaciones! Bien hecho.- Red acarició la cabeza de su Pokémon.

Al parecer no eran los primeros en descubrir el lugar.

-¡Un Gatito!

Leaf se acercó al gato y acarició suavemente sus orejas, este se dejó dar cariño, agradeciendo con sus ronroneos.

-Querrás decir Gatote.- Miró al nuevo luchador.- ¿Incineroar, cierto?

El mencionado asintió.

-Somos Red y Leaf, entrenadores Pokémon.

-Oye Gatito, ¿No quieres ser mi Pokémon?

-Leaf, son luchadores independientes, no podemos capturarlos por más que queramos.

-Ah... ¿Eh?

Leaf observó un momento los pies de Incineroar, entremedio había una... ¿cola?

-Reconocería esa cola donde sea.

La entrenadora se agachó,  encontrando un viejo conocido suyo.

-¡Pikachu!- Leaf lo tomó en brazos y acarició su estómago.

-¡Pika Pika!

-Ha pasado mucho tiempo amigo.- Dijo Red jugueteando con sus orejas.

-¡Chu!

-¡Hola chicos!

Atrás de ellos estaban los Inklings, Villager y Canela.

-Hola pequeños, somos Red y Leaf, entrenadores Pokémon y próximamente sus amigos.- Dijo la chica.- Estos son nuestros Pokémon, Squirtle, Ivysaur y Charizard.

-Y este grandulón de aquí es Incineroar.

-Ustedes deben ser Canela, los Inklings y...

-Villager.

Su mirada vacía infundió ciertos nervios en los entrenadores, más aún cuando vieron que tenía equipada un hacha en su bolsillo.

-C-claro...

                      ^^^^^^^^^^

Ya eran las 11 de la mañana, algunos smashers estaban reunidos en el Living charlando tranquilamente, jugando cartas o viendo una película.

-Cambio color azul.- Dijo Fox con cierta malicia reflejada en su sonrisa.

-Maldito.- Susurró Falco, sacando una carta.- Lo siento Sonic, es lo que hay.- Lanzó un +2 azul.

-Al contrario viejo, Gracias.- Dijo lanzando un +2 rojo.- ¡UNO!- Gritó alertando a los demás, quienes buscaban la manera de que el erizo no ganara.

-Uy, perdona Fox no tengo nada más.- Dijo Ike lanzando el plato fuerte, el +4.

Y por desgracia, Fox no tenía nada para contrarrestar la suma.

No por nada este juego rompe amistades.

-¡NOO!- Gritó enojado.- ¡¿No podías sacar carta?!

-Cierto... No se me ocurrió en el momento.

Casa para todosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora