Director Jeon. [KM국민]

4.

JiMin se encontraba solo sentado en el escritorio de una de las tantas aulas que le tocaba atender día a día. La hora de salida de clases ya había pasado hace media hora.

Estaba allí... Suspirando pensativo mientras golpeteaba la goma de su lápiz contra su libro de Filosofía.

Estos días ha estado más ansioso de lo normal.

Pues,el joven Director,no deja de acecharlo.

Ha pasado un mes y no hay día en el que Jeon no aparece en frente suyo con una mirada socarrona. Y sólo éso hace. Lo observa con altanería y picardía por un largo tiempo y después se va.

Le pone los nervios al tope.

Ya no quiere tener que sentirse abatido y acosado,ya se cansó de sus juegos.

Podrá ser el Director de el Instituto pero éso no le da el derecho de hacerle sentirse incómodo día a día.

Por éso mismo lo estuvo esperando pacientemente ya que sabía que la tarea implacable de ese tipo es venir a molestarle después de clases.

Y así pasó.

Miró en cámara lenta cómo el director,con sus ropas finas y saco largo,entraba al aula mirándole de forma intensa,con sus finas manos dentro de su pantalón de tela.

Los pasos de sus sofisticados mocasines era lo único que se escuchaba.

Y entonces se ubicó en frente suyo,apoyando su trasero en el escritorio de uno de los alumnos.

Le miró con una ceja alzada,apretando sus bolsillos haciendo que el bulto de su entrepierna se notara más.

JiMin tragó saliva desviando la mirada.

De repente se le olvidó qué decir.

Su cuerpo sintió calor ante su presencia,así que sin poder evitarlo agarró sus propias manos apretando su pantalón,tratando de calmar esos nervios.

Pero no lo logró.

Esta vez,hasta una gota de sudor resbaló por su sien.

Gota que no cayó al suelo.

Porque un dedo la quitó de forma lenta y cuidadosa.

JiMin jadeó mirando al apuesto director ahora a unos centímetros de su rostro.

“¿Cuándo se movió hasta llegar aquí?” se preguntó asustado.

“¿Tanto tiempo me estuve nervioso pensando en qué decir?”

“Tengo que hacerlo...”

“JiMin,vamos. Es tu momento.”  habló consigo mismo,tratando que el temblor de su cuerpo deje de ser tan notorio.

"HAZLO.”

— O-oiga...

JungKook no habló,sólo le siguió viendo de la misma forma.

— Director Jeon.... —cerró sus ojos fuertemente.— ¿Qué quiere de mí? —preguntó al fin,un mes después.

Allí la expresión de el más alto cambió.

Se puso erguido,mirando hacia abajo,al tierno rostro de el profesor.

Y sonrió con soberbia.

— Y-ya... Deje de verme... Sólo dígame qué quiere,ya no lo soporto. Me siento incómodo,se siente feo. —le dijo,afligido.

Él sólo quería disfrutar de su trabajo.

Es una persona frágil y respetuosa,nunca le han gustado los problemas.

Por eso sus nervios y temblores.

Pero el mayor seguía allí,de pie,sin intención de nada.

Cuando JiMin creyó que de nada sirvió hablarle,suspiró mirando hacia el suelo,mientras jugaba con sus pequeñas manos.

— Está bien,entiendo. No quiere hablar conmigo. —mordió su labio inferior.— Sígame mirando si desea,algún día lo superaré.

Los ojos de el más alto se suavizaron.

La mueca de soberbia apagándose.

Jeon ésta vez si pareció caer en razón,porque se agachó a su altura mirándole con una sonrisa más dulce.

— Usted no lo nota. ¿Cierto?

JiMin rascó su nuca,confundido.

— ¿A.... A qué se refiere?

JungKook tomó una de sus manos sudorosas,acariciando sus nudillos.

— Usted se me hace muy bonito. Me gusta verlo.

JiMin se sonrojó en cuestión de segundos,apretando sus labios.

Fue tan directo.

Su mano tembló tanto que se aferró a la mano de el mayor para que parase.

— ¿Quiere saber... Qué quiero de usted?

Todo pasó en cuestión de segundos.

Jeon apoyó una pierna atrás suyo,acorralando al pequeño profesor.

Se acercó peligrosamente a su cuello,inhalando su aroma.

Pasó una mano por su pecho,de forma sensual,acariciando con pasión.

JiMin tembló de pies a cabeza,cerrando sus piernas con fuerza.

— Sé que eres gay. —le dijo acercándose al lóbulo de su oreja,dándole una ligera mordida.— En casa tuve por mucho tiempo a una esposa que no me complacía... —bajó su mano sin pudor alguno hacia su vientre bajo. JiMin jadeó removiéndose con suavidad.— Pero hace dos meses miré a un hermoso jovencito entrar por las grandes puertas de este Instituto,con una mirada tan brillante y esperanzada. Tan dulce,tan puro. —acarició con más fuerza el vientre bajo de JiMin,haciendo que el bajito sin poder evitarlo soltara un gemido desesperado,moviendo sus caderas.—  Mírese en un espejo y se dará cuenta por qué me gusta venir a a observarlo todos los días.—rió de forma sensual,chupando su cuello con delicadeza.— Mi intención nunca ha sido molestarlo,pero verlo tan nervioso por mí me encanta.—admitió,disfrutando de lo sumiso que es el menor.—  ¿Quiere saber qué quiero? —besó su oreja,poniendo una mano en su entrepierna.— Quiero comerlo.

”Cielos.” Pensó JiMin,dejándose tocar.