Después de dudar por un momento, me decidí por caminar junto Ageha. Le advertí sobre estar cerca de mi y permanecer tranquila, a lo que me devolvió una sonrisa en concordancia.
Habiendo salido ya, repentinamente encaré el mismo problema de días antes. Ageha se había aferrado a mi brazo, caminando a mi lado.
Quizá debido a ese conveniente vestido que escondía sus innaturales partes. Pero, sólo por un momento, había olvidado que ella era una extraña e indescriptible criatura. Tuve un escalofrío.
Agradecidamente, Ageha no se separo de mí. Desde que ella tenia cuatro piernas, su andar era levemente antinatural, sin embargo, no era muy notorio.
Pensándolo bien, no tenían ningún motivo del cual zafarme de su agarre, en lugar de ello, dejarla sola podría ser demaciado peligroso.
Debería de ser un alivio, por lo que tendría que dejar de preocuparme sobre permitirle a Ageha salir afuera de casa. No obstante, seguí ansioso respecto al cambio que esto traería a nuestra relación. Me sentí acorralado.
Dejando de lado las advertencias acerca de la razón o moralidad, empecé a reconocer a esta misteriosa chica como parte del "sexo opuesto". Preguntas y dudas se arremolinaron en mi cabeza.
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Butterfly Affection
Science FictionAl regresar a casa encontré algo cerca de mi casa... Algo extraño, es difícil de describir pero tiene forma de humano excepto por algunas partes... ¿Que sera?