Y el tintero derramado hasta arriba
Y en la pluma, tu mirada
Y en el papel, tu sonrisa
Y en cada letra tú, en cada palabra que escribía. Sólo , sólo te veía a ti.
Recuerdo, recuerdo cada momento en un instante,
que se evade como parte del mundo,
como si tú y yo no existiéramos
como si la vida misma desapareciera y esto fuera un maldito sueño,
y sí, puede qué lo sea, pero quien sabe
ni tú ni yo somos el acento en esta historia.
Revuelcate en mis sábanas , ensucialas con tu aroma y ahora,
ahora, en este preciso momento, envuelveme entre tus brazos y sienteme bien adentro.