👑×THE KING×👑 [TK]

Capitulo 27

Jungkook se quedó mirando unos segundos como Taehyung se largaba de ahí y luego decidió seguirlo detrás suyo gritando su nombre, pero Tae no se daba la vuelta. El rey corrió unos cuantos metros y llegó al bosque del pueblo, un lugar lleno de árboles y tenía una linda vista al palacio.

Taehyung se detuvo y secó sus lágrimas, el castaño llegó hacia el y lo tomó de los hombros.

—¡T-tae! ¿Que haces?—preguntó Jungkook con preocupación—Por favor, volvamos al palacio.

—No q-quiero, estoy harto de ese lugar.

—Debes calmarte, le pediré a las sirvientas que te hagan un té y hablemos de es-

—¡No!—gritó el mayor interrumpiendo a Kook—¡No quiero volver! ¡Ese lugar es un infierno para m-mi!

Los dos se quedaron en silencio, Taehyung sollozó y bajó la cabeza cerrando sus ojos con presión.

—A-arruiné todo, soy el peor rey del mundo. No merezco ese puesto en la realeza—murmuró y cubrió su rostro con sus manos—Solo quiero volver el tiempo atrás, cuando era un niño, Jennie estaba viva y Hoseok no me veía como un monstruo. Nadie me veía como un monstruo, pero ahora soy la peor amenaza del palacio.

—Taehyung no digas eso, aún tienes tiempo para resolver las cosas. Tal vez no fuiste el mejor rey pero puedes mejorar, todo saldrá bien.

Jungkook mordió su labio, odiaba ver a su rey así de triste y llorando. Quería solucionar todo pero no se sentía capaz.

—Ser rey no es para mi, solo voy a empeorar las cosas.

El mayor secó sus lágrimas, tomó su corona en sus manos y la miró por un largo rato para luego dejarla caer al césped. Jungkook abrió bien sus ojos y conectó sus miradas con Tae.

—T-taehyung

—¿Que? Esa corona solo es un pedazo de oro, no vale más que lo que tenemos al rededor.

Se miraron por unos segundos, Jungkook no se resistió a seguir viendo llorar a su mayor y lo abrazó fuertemente. Taehyung correspondió el abrazó y dio un suspiro largo, ese abrazo era lo que más necesitaba en esos momentos.

—Jungkook, te quiero mucho. Hasta podría llegar a decir que te amo.

Los dos se separaron solo un poco y se miraron a los ojos, Jungkook sonrió dulcemente y acarició la mejilla de Tae.

—Yo... también te quiero—respondió el castaño en un susurro—También podría llegar a decir que te amo.

Soltaron una pequeña risa, Taehyung dejó de llorar y solo se dedicó a mirar a Jungkook para luego tomarlo de las manos. Los dos se sonrieron, Kook recordó el beso de hace rato y sintió sus mejillas arder, a decir verdad le había gustado mucho.

Taehyung se acercó un poco más a el y lo besó otra vez. Jungkook pasó sus manos por la nuca de Tae y siguió el beso. El lugar estaba en silencio y solitario, solo se escuchaba el ruido del viento y los chasquidos de sus labios. Se separaron para tomar aire y Taehyung apartó la vista.

—Quiero irme de aquí—dijo Taehyung de repente—Quiero cambiar mi vida, quiero ser feliz, quiero dejar de sentirme presionado por los demás y que dejen verme como un joven rey obediente que sufre la muerte de sus padres. Quiero vivir de verdad.

—¿Y que vas a hacer?

Tae miró la corona en el césped, observó el pueblo y soltó las manos de Jungkook.

—Me iré

—¿¡Eh!?

—Si quieres quedarte aquí es tu decisión, no te obligaré a que estés detrás mío el resto de nuestras vidas.

Finalmente Taehyung se dio la vuelta y comenzó a caminar por el bosque. Jungkook alzó sus cejas de la sorpresa y se acercó hacia el.

—No p-puedes dejar tu reino.

—Les haré un gran favor, créeme. Hoseok será mejor rey que yo, prefiero irme y no hacer sufrir más a mi pueblo.

Tae siguió caminando, Jungkook se detuvo, miró al pueblo y luego comenzó a caminar al lado del mayor.  Caminaban en silencio, Jungkook suspiró.

—Pues yo me voy contigo—respondió Kook—Prometí no dejarte solo y eres lo único que me queda.

—Gracias.

Los dos se miraron, sonrieron y Taehyung entrelazó sus manos.

—Definitivamente somos un par de locos sueltos—dijo Jungkook y los dos rieron.

—Al menos este par de locos va a tener una mejor vida que la de antes.

Estuvieron en silencio un rato y siguieron caminando. La corona había quedado sola en el césped mientras que los dos jóvenes caminaban tomados de la mano, enamorados y tal vez locos como Jungkook había dicho.

No sabían que hacían, solo esperaban que el futuro los sorprenda.

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