Razones para amar a la idiota de Lisa [Lisoo]

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—¡Lisa! ¿Donde estás?

Bien. La de cabellos oscuros se vio forzada a levantarse de la cama matrimonial para buscar a su novia; la cuál por cierto no respondía sus llamados —algo que Jisoo odiaba—.

Con desgano, abrió la puerta e hizo un paso del umbral hacia el pasillo. Allí, su desarrollado olfato percibió algo.

—¿Lisa? —la mayor no podía reconocer el olor que había dentro del departamento, y eso le preocupaba—. ¡Lisa! —llamó de nuevo, pero la menor no respondía.

Jisoo tuvo que caminar por el pasillo hasta llegar al living, salón que estaba pegado a la cocina.

Ahí, vio a su novia dormida en el sofá blanco y rústico de la sala; sumergida en el —increíble—, sueño que estaba pasando por su mente. Jisoo sonrió al verla, ¿Cómo podía verse tan tierna?

Sin embargo, algo la sacó del trance.

Su olfato reconoció el olor que olió antes; se estaba quemando algo.

—¡Lisa! —bramó, casi corriendo a la cocina—. ¿¡Como puedes poner algo para cocinar y luego dormirte!?

La menor dibujó una sonrisa traviesa en sus labios.

Al parecer no estaba tan dormida como Jisoo pensaba.

razón tres:
Porque puedes ser estúpidamente despistada en algunas ocasiones