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Un castaño leía tranquilo aquella carta que un rubio le había dejado.

Levemente lágrimas caían rozando sus mejillas. La carta le conmovió.

- Nunca te olvidaré, Roxas... - Susurro el castaño limpiando sus mejillas.

Guardo la hoja en el sobre y de ahí en su mochila donde ya hacían un libro de manga y otro de una novela terrorífica.

- ¡Hey! - Interrumpió sus pensamientos un rubio de alegre voz -Sora llegaste temprano.

- ¡Claro! Ventus, estoy emocionado por el Festival - Mencionó nervioso el de piel morena.

De ahí también vinieron Vanitas y Riku como siempre peleando por cosas triviales y sin sentido.

Todos sacaron sus poemas para recitar.

De pronto la puerta de aquel aula se abre, nadie imaginaba a quien iba a pasar por aquella puerta.

- ¿¡R-Roxas!? - Sorprendidos dos chicos del club, fueron a abrazar al susodicho.

- L-Lo siento, por todo lo que hice - Susurro Roxas apenado y arrepentido con apenas un hilo de voz - Espero y me lleguen a perdonar...

En ese momento se aclararon cosas, obviamente Vanitas y Riku no recordaban nada, pero eso no impidió la conversación.

- Yo creo que ahora ya tenemos un nuevo presidente del club - Mencionó Ventus con nostalgia.

Los demás estaban de acuerdo aunque no todos.

- P-Pero Ventus ese es tu puesto - Con tristeza Roxas prefiere no recordar lo demás y antes pasado.

- Por ello yo te lo otorgó a ti, porque se que nos vas a cuidar

La tarde empezaba a notarse ahora todos reunidos con sus poemas recitaban junto a la fragancia del te de hierbas y sabor a cupcake los chicos que antes no eran nada, ahora son todo entre ellos.

- Gracias por estar aquí, Sora - Al unísono se escuchó decir entre Roxas y Ventus - Todos nosotros te amamos

🍬Sugar🍬

Your Reality | SoRokuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora