Sexta Mordida

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Ren estaba con la mirada perdida, hoy no había venido ese chico que siempre le muerde su oreja.

Pensó que no sentiría la diferencia, pero ahí está, suspirando con la esperanza de que venga Hyurno.

-. Ren hoy estas raro, ¿estas bien? -. ¿Tan obvio era?.

Ren sólo negó con la cabeza, ni ganas de hablar tenía.

Mientras Hyurno estaba extremadamente aburrido en la casa de su abuela. Hoy tocaba visitar a su abuela, pero no tenía nada que hacer, ama a su abuela, pero el quiere ver al chico que le gusta y morder su oreja.

Suspiró por quinta vez en una hora. La madre del menor, al ver que tenía una mirada aburrida, le propuso salir a caminar un rato. Hyurno no se opuso, no tenía algo más interesante que hacer.

Ren ya había salido de clases, ni siquiera sabe si encargaron tarea, estaba más concentrado en pensar en el oji-rojo.

Caminaba sin prestar atención, sólo miraba al frente.

Hyurno a lo lejos vio a un chico igual al suyo, camino para ver su rostro, pero no fue necesario ya que en la zona en la que muerde el peli-blanco, tiene una perforación.

Sonrió feliz y corrió para hacer lo que siempre hace al ir a la escuela.

Lo abrazo por detrás y mordió su oreja, el más alto quedó en shock y sonrió al sentir esa mordida.

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