Cerezas

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Escrito:  02 / 02 / 2019
Publicado: 14 / 02 / 2020
Palabras:  +1000

N/A:
Mi primer fanfic Jily y mi primer historia hetero en este perfil, I'm happy!

"Cerezas y manzanas" están conectados a "Chocolate y canela", un TS Wolfstar que sucede en la misma linea temporal, solo que narrado por Sirius y Remus, respectivamente. Aconsejo leer ese primero, pero el ordén no importa realmente y es a su elección.

Espero que les guste y dejen muchos comentarios(?) ♥

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Mhm... pasto humedo, manzana y... cerezas. ¿Cerezas? ¿Porqué su amortentia contendria cerezas? Claro, Lily siempre come cerezas.

Luego de oler la amortentia que el profesor Slughorn habia preparado, anotó en su pergamino lo que él olia y buscó los ingredientes para preparar la poción junto con Sirius; al que tuvo que golpear para que reaccionase del shock en el que parecia haber quedado luego de oler el embriagante vapor del caldero.

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A la mañana siguiente, mientras tomaba una ducha, James se encontraba entre relajado y pensativo.
Que su amortentia oliese a cerezas no le molestaba ni sorprendia; él ya sabia que contendria algo caracteristico de su futura esposa, eso era de esperar.
Lo que si le resultaba sorprenderte y de cierta forma cautivante, era como una simple poción podia contener de forma tan éxacta el aroma de Lily.

Quizás, esa era una de las cosas que más le gustaba de la magia, la imposibilidad de volver algo posible. Si es que esa palabra éxiste...

Al salir de la ducha, se vistió con la parte inferior de su uniforme, y con la camisa a medio poner y sacudiendose el cabello con una toalla, salió del baño. En la puerta se encontró con un rádiante Sirius que, en lugar de saludarlo como normalmente hacia (con un comentario indecente o incluso una nalgada), pasó tarareando la canción que sonaba en el tocadiscos de Remus y entró en una ducha sin siquiera desvestirse.
El castaño volteó a ver a sus amigos al mismo tiempo que éxclamaba:

-- ¿Y a éste que bludgers le pasa hoy?

Una pregunta que ni el licántropo ni el animago pudieron responder más que con un encogimiento de hombros y un sonrojo intensificado por parte de Remus. Al parecer, Sirius a dicho otro de sus comentarios morbosos para molestar a Remus y hacerlo sonrojar.

Negó con la cabeza restandole importancia al asunto y terminó de secar su cabello con un hechizo. Ya tenia hambre, y no planeaba perderse el desayuno por culpa de otra de las ideas o planes turbios y confusos que la oscura mente de su amigo estuviese maquinando. No le pasaria eso de nuevo.

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Lily siempre come cerezas. Volvió a recordar al quedar sentado frente a ella en el comedor.

Durante el desayuno: té de lavanda con una porción de pastel de cerezas.
Durante el almuerzo: siempre el postre incluiria una taza de las mejores cerezas frescas, seleccionadas especialmemte para ella por los elfos de las cocinas.
Y durante la cena, era seguro que siempre tendria un helado de cerezas o alguna especialidad de los elfos con la dichosa fruta.

Sin importar el horario o el dia, Lily siempre tendria tiempo para comer algo de su fruta favorita. Porque siempre habria tiempo para las cerezas pero nunca para James, y eso él le comentó en el Gran Comedor durante el desayuno a Sirius.

James ya iba por su tercer porción de tarta de manzana y su segunda taza de café mientras observaba a Lily leer El Profeta, junto con Remus (que sí podia acercarse a ella y hablarle, el desgraciado ese), y comer la misma porción de tarta de cereza desde casi un cuarto de hora. James admiraba la tranquilidad con la que Lily comia, disfrutando cada bocado, como si esa sola porción fuese la última que comeria en su vida y quisiese hacerla infinita.

-- ¡Psst! Sirius, crees... ¿tú crees que en nuestra noche de bodas élla prefiera comer cerezas en lugar de... ya sabes... estar conmigo?

Su amigo volteó a mirarlo confundido al tiempo que metia en su boca un bollo de canela y le respondia sin molestarse en tragar.

-- ¿Deg que eshtash hablandogh?

El castaño hizo una mueca de asco y señaló con su cabeza hacia la pelirroja a unos metros de ellos que soplaba con delicadeza su taza de té mientras sonreia disimuladamente ante un comentario al parecer gracioso, dicho en su oido por el licántropo a su lado.
Al dirigir su mirada hacia donde su amigo señalaba, el moreno sonrió y con un toque de burla y sarcasmo, ignorando la verdadera preocupación del castaño, habló.

-- Está claro que si, James. Esa noche deberás vestirte de cereza si al menos quieres acercarte a sus labios. Quién sabe, quizás así consigas que te muerda.

Al castaño se le enrojecieron las orejas inmediatamente y le dió un empujón molesto a su amigo que no paraba de reir.

Ya no tenia apetito, pero cuando estaba a punto de levantarse de la mesa sus ojos se encontraron con el momento exacto en el que un pequeño trozo, casi minúsculo, de la dichosa fruta del demonio,  caia justo en la mandibula de la pelirroja.
Minúsculas migajas de pastel decoraban sus labios como estrellas el cielo en una noche despejada; y el rojo y dulce jugo chorreaba leve y casi imperceptiblemente por las comisuras de su boca.

De repente, James sintió como su boca se secaba, la adrenalina comenzaba a fluir por su sangre, y unas repentinas ganas de pasar sus dedos por su barbilla y limpiar las migajas venian a él.

Viendose amenazado por el pánico y las diversas imagenes que venian a su imaginación, James hizo la primer cosa inteligente que vino a su mente: tomó la servilleta más cercana y la arrojó sin cuidado hacia el plato de Lily. Ella levantó la mirada sorprendida, Sirius y Peter voltearon a verlo asustados, y hasta el impasible Remus dejó su taza de chocolate para observar su reacción.
Al darse cuenta de la forma brusca en la que habia actuado, decidió usar la poca dignidad que le quedaba y decir:

-- Limpiate la barbilla, Evans, estás repleta de pastel de esas malditas cerezas.

Y dicho esto, se levantó ante la mirada estupefacta de la mitad de la mesa Griffindor y salió del Gran Comedor, para luego echar a correr hacia los dormitorios.

Seguramente se perderia las clases del dia humillandose continuamente por su estupidez en la habitación; pero valdria la pena si no iba a volver a ver los tentadores labios de la pelirroja que lo traia loco, ni a sentir ese exquisito olor a cereza tan caracteristico en ella, en todo el día.

~♡~

《Yo aquí desangrandome, sentado frente a ti, me marcho para poder tener tranquilo el corazón.
Labios de rubí, de rojo carmesí, parecen murmurar mil cosas sin hablar》

~♡~

[Lo de arriba es una pequeñita frase de una canción que justo escuchaba en el momento en el que escribia la escena en la que James corre xdxd]

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N/A "2"   [14/02/2020]
Ni bien pueda subo la segunda parte de este (la de Lily) y las dos partes del Wolfstar. Las cosas siempre se me desordenan un poquito pero no queria dejar pasar este dia sin publicar aunque sea algo de San Valentín.

Cerezas & Manzanas [TS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora