Naturaleza

Recogiendo los pedazos de un corazón roto

Pareja: JayTim

nota: tal como dice, esto es después de lo del Joker, si hay lemon por ahí, espero les guste

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El calor lo seguía asfixiando y caminaba con pasos cortos hasta poder refugiarse en un tejado, tenía que ocultarse, maldito celo.

Se preguntó si alguna vez las cosas irían bien, ojalá que hubiese renacido como otro y no con la misma maldición, de solo recordar le hacía odiar a ese mal nacido, a ambos.

*****

Luego de todo el ultraje por parte del Joker, el maldito había dejado una bomba, puso su frente contra el suelo y botó las últimas lágrimas.

"Lo siento Bruce"

No solo por no ser fuerte, sino por haberse dejado tomar por el psicópata, por su bebé no nato...por no haber tenido confianza en él.

*****

La muerte lo había abrazado y hecho descansar a su cuerpo y a su alma, agradecía la paz y el silencio...era el momento más bello de su vida y hasta eso le fue arrebatado.

Todos los recuerdos lo golpearon y gritó, estaba desesperado

--AAAAAAhhh

El dolor desgarraba su alma, su corazón, no quería eso, no más; corrió y recordó el dolor en sus huesos, el terror lo perseguía, no le importó nada más que huir.

La locura era tener que volver a este lugar, pero no era tan valiente como para darse muerte por su propia mano, algo le hacía temer y no sabía qué era.

Después de algún tiempo de vivir con Ras y Thalía, quiso encarar la vida; desde lejos y oculto entre las sombras había visto al hijo de Bruce, sintió que su pecho ardía y las arcadas volvían recordándole lo que él no tuvo, quiso creer que lo odiaba, pero no podía, no aún.

Volvió a Gotham, la ciudad maldita no había cambiado nada, estuvo solo vigilando, esperando ver un cambio...no hubo tal cosa.

Batman seguía siendo Batman, creyó que tal vez estaba pasando su luto y respetaba su memoria, pero eso se fue al carajo cuando vio al nuevo robin, una risa amarga brotó de su pecho y las espinas se clavaron en su corazón.

"Eres un hijo de perra Bruce"

Seguía vivo...el malnacido seguía vivo, en ese maldito lugar que solo servía para aumentar la locura de quienes en él habitaban.

*****

Nunca le dijo del cachorro, no valía la pena, de solo recordar ese hecho lo hizo vomitar, cayó de rodillas mientras se sostenía el estómago.

Pero se maldecía a si mismo por haber regresado a él tal como lo hizo Dick, podían odiarlo y maldecirlo, pero eran como polillas atraídas al fuego, eran tan estúpidos.

Se preguntó si su hermanastro mayor había quedado embarazado alguna vez, pero el pensamiento se le hizo frustrante al saber la respuesta, Bruce siempre cuidaba de Richard, hasta cuando pasó sus celos, él ya tenía todo listo para su llegada.

Continuó caminando hasta llegar a su guarida, ahí podría despotricar tranquilo y odiar su condición en paz.

"Malditos todos"

Cuando por fin pudo recostarse en su cama, suspiró aliviado, al menos no se había topado con ningún maniaco.

Con incomodidad se despojó de sus prendas hasta quedar desnudo, llevó sus manos a su entrada y gimió, sintió ese líquido espeso y se metió dos dedos con facilidad, arqueó su espalda y dio un respiro profundo, respiraciones suaves y acompasadas, el calor lo hacía retorcerse y curvar los dedos de los pies.