Muchacho malcriado

2.1K 116 43
                                        

Pareja: Damian x Jaison

advertencias: shota (intento de), lemon (intento de) osea todo es un intento de jajjajaja ok no, si hay escenas sexosas

*****

El placer recorría su cuerpo y el aroma a su alrededor lo estremecía, jadeó suavemente y se estiró como un gato mientras sus ojos se encontraban con los verdes que lo miraban con intensidad, sonrió malévolo y se mordió los labios.

Damian estaba sentado en una silla, mirándolo, podía notar su respiración agitada, los hombros tensos y la vista afilada hacia él, se relamió los labios al mismo tiempo que el chico.

--Eres un descarado—vio al joven acercarse con pasos sigilosos—Juegas conmigo ¿verdad?—se sentó a su lado y con su mano acarició su tórax y pellizcó un pezón causando que gimiera.

--Muchacho malcriado

*****

Tal vez la vida lo preparaba para esto, para este niño.

La primera vez que lo vio fue en Nanda Parbat, mientras entraba pudo divisar a un niño, su piel se erizo por el parecido que tenía con Bruce, fue solo cuestión de días el enterarse de que era su hijo.

También se sintió extraño cuando pudo ver al pequeño y fue peor verlo crecer, nunca se acercó, no quería tener nada que ver con él; el muchacho llegaría un año antes que él a Gotham, con apenas nueve años.

Le pasaba con nueve años, se sintió extraño; todo el tiempo solo mantuvo su distancia y ninguno de los dos dijo algo de sus tiempos en la isla, entrenaron y se ignoraron.

El pequeño de ojos verdes siempre lo miraba fijamente, pero él solo podía concentrarse en otras cosas, aún recuerda la primera vez que sus miradas se cruzaron.

Las peleas con Bruce solo habían logrado que nunca tratara con el niño, ni tampoco le dio alguna importancia, solo quería deshacerse de esos sentimientos en su pecho.

Cuando estuvo con Tim las cosas se destensaron un poco, pero los secretos antes de él aun le perseguían, el hecho más importante y el por el cual creía que Damian lo odiaba.

No fue un celo, solo era deseo, Bruce lo había acorralado contra la pared de la biblioteca mientras lo presionaba y penetraba, puede recordar claramente lo posesivo y excitante del caballero de la noche; ocultos entre las sombras de los estantes, había gemido y se había dejado hacer, solo cuando abrió los ojos pudo ver los verdes del niño, los miraba a través de la rendija de la puerta principal, pero no detuvo el acto, solo se aferró más al mayor y siguió con el acto sexual.

Detestaba ese recuerdo, después de ese acto había sentido que una brecha se creó entre él y Dick, sabía que Damian se lo había contado, así que solo agachó la cabeza y dejó que las palabras no se dijeran, no había nada de que decir ni justificar.

El niño había sido testigo de algunos hechos en su vida, habían peleado juntos, lo salvó, se maldijeron, que curioso, era como con Tim, solo que el carácter de él era igual al del niño.

El mini murciélago tenía un don para aparecer en sus actos sexuales.

Había entrado en celo sin predecirlo, Tim lo había llevado a una habitación en un departamento lejos del centro de la ciudad, se había dejado hacer así que tener al joven entre sus piernas penetrándolo entre jadeos era cosa normal en su relación, pero puede recordar, esos ojos verdes en la ventana, el ceño fruncido y la duda de por qué estaba ahí.

Aún rondaba su mente el por qué aparecía ahí, un niño sin casta, tan misterioso como su origen y sus padres.

Luego de la separación de Bruce, el niño ya no era tan niño, había entrado a la pubertad, seguramente pronto mostraría casta; se habían apegado, una que otra conversación, algo de invasión de la privacidad, la curiosidad de ciertos temas.

NaturalezaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora