Por un lado siempre supe cómo terminaría todo, pero por el otro lado siempre tuve un poco de esperanzas, quería tener aunque sea un poquito de fe en todo.
Duele más cuando nunca dejaste ser algo, te quedas con las ganas de vivir todos esos momentos que solo tuvieron lugar en tu mente.
Duele aún más cuando te toca entender que no era recíproco.
Intentas sanar pero la pregunta de ¿qué hago mal? Vuelve una y otra vez atormentandote.
¿Me enseñas a quererte? Te digo una y otra vez, ¿acaso puedo darte algo que no tengo? Perdóname por tantas preguntas, solo intento descifrar el porqué nunca fui suficiente para vos
ESTÁS LEYENDO
Un diario no tan intimo
Short StoryQue la tristeza no te domine... Escritos míos, caso contrario aviso. ***aviso: algunas historias (especialmente las primeras) ya no forman parte de cómo me expreso, pero no las elimino porque formaron parte de mi crecimiento***
