Un diario no tan intimo

El mensaje que nunca te envie

Hola ¿cómo estás?.
Nada, te escribía este mensaje para contarte que te extraño pero no deseo volver, nuestros último día fue muy difícil y nuestra pseudo relación complicada.
Quise agradecerte muchas veces, por fin estoy haciendo eso que vos me impulsaste a conseguir, supongo que me impulsaste a muchas cosas más aparte de eso.
Mis días son bastante aburridos sin vos ¿sabias? Extraño tus mensajes (también cuando discutiamos), extraño tus besos extasiados y tus abrazos de paz.
Aveces me quemo la cabeza pensando en cómo fuiste tan efímero, también miro el techo imaginando como pudo haber sido si hubiera hecho las cosas diferentes pero lastimosamente por más que las imaginé nunca van a poder ser.
Decime como hiciste, contame que tenes, supongo que me gusta lo complicado y vos lo fuiste bastante. Te sentía imposible y eso me encantaba. Me siento una masoquista, una persona que se autofragela con el filo de lo imposible.
Termino este mensaje diciendo que mi mundo se volvió utópico junto a vos y siempre lo supe pero no soy de las que se dan por vencida, aún no me doy por vencida, deseo verte, acariciarte, deseo despedirme ya que nunca lo logre hacer.
Espero siempre te acuerdes de lo bueno y no le des mucha importancia a lo malo. Te quiero