Virgo x Capricornio

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Capricornio - Activo - 20 años
Virgo - Pasivo - 17 años

Capricornio y Virgo llevaban siendo amigos durante mucho tiempo, unos 10 años aproximadamente, cuando uno tenía 7 años y el otro contaba con 10. Ambos siempre iban a fiestas juntos. Virgo no era el típico nerd del salón, era el más inteligente, si. Pero era respetado, era guapo, y muy codiciado por las chicas. Es por eso que cada vez que iba a una fiesta terminaba besándose con alguna desconocida, pero no por qué él quisiera, si no por qué siempre se emborrachaba y las mujeres se aprovechaban de eso, Capricornio siempre se quedaba en la barra de bebidas observando con disgusto a su amigo besuquearse con las chicas con su compañero de barra Piscis.

- Estoy harto de esto, sabes? - comentó Capricornio hablando con Piscis, mientras que miraba como unas chicas miraban de forma indecente a Virgo quien estaba sentado con demás chicos tomando.
- Por que no solo le dices la verdad? - le preguntó el pez a la cabra. - Solo dile lo que sientes cuando lo ves besarse con otras chicas. - el pez tenía razón, Capricornio detestaba ir a las fiestas con su mejor amigo por qué cada vez que juntaba sus labios con los de alguna chica ajena se llenaba de rabia y celos, y es verdad, la cabra estaba enamorado de su amigo el Virgen. El se negaba a decir la verdad, pero su amigo Piscis ya lo sabia.
- Y que piense que soy un "asqueroso gay" para que me deje solo, no gracias... - contestó Capricornio completamente frustrado.
- Pues, yo no creo que sienta repulsión, que acaso no lo has visto? - preguntó Piscis - Que quieres decir? - preguntó Capricornio
- No has visto que cada vez que una chica lo besa el la aleja, y le dice que no está interesado? Por qué yo sí, y veo que cada vez que lo dice te mira de manera disimulada. - contestó Piscis, haciendo que el chico cabra abriera los ojos como platos y mirara a su compañero de tragos.
- Me estás jugando una broma, como es posible que le guste? Deja de jugar conmigo... - contestó irritado Capricornio  - Piensa que es una broma si quieres, pero tu no lo vez por qué estás quejándote exactamente de esto y ya estás completamente borracho, sin embargo no has tomado ni una gota de alcohol, por qué? - Preguntó el chico bajo el signo de agua, haciendo que Capricornio se encogiera de hombros.
- No te incumbe, ahora, yo me voy. No quiero que eso termine en algo más. - dijo apuntando a su mejor amigo quien estaba siendo besado desesperadamente por una chica que estaba en primer grado, mientras que ellos estaban en tercer grado.
Se acercó a donde estaban, y alejo a la chica.
- Disculpa, estamos ocupados. - dijo la chica indignada. - Me vale madres, Virgo, nos vamos. - dijo tomando del brazo a su mejor amigo y sacándolo de aquella ruidosa casa llena de música y pubertos hormonales en busca de placer.
- Tranquilízate Capri... ~ - dijo Un Virgo borracho balanceándose de un lado a otro.

Capricornio subió a Virgo al auto en el asiento de copiloto, pero antes de cerrar la puerta su amigo lo interrumpió.

- Gracias por sacarme a esa chica loca de encima - comentó el mismo chico borracho mirando a su amigo. Capricornio asintió en forma de decir "de nada". Cerró la puerta y él se subió en el asiento de piloto. El mayor arrancó el auto y condujo hasta su casa, ya que los padres del menor estaban de viaje y le dieron permiso a Virgo de quedarse con Capricornio por unos días, quien contaba con casa propia. Estacionó en auto, todo el camino había sido puro silencio.

- Por qué no me hablas?? - preguntó Virgo un poco menos mareado. - A caso ya no me quieres? - Capricornio sonrió con un poco de dificultad.
- No es que no te quiera Virgo... Solo estoy frustrado y estresado. - contestó él mayor al menos quien lo miraba atentamente. - Bueno, yo sé cómo quitarte el estrés... - Contestó Virgo de una manera seductora, haciendo que Capricornio se sobresaltara.
El chico Virgen desabrocho su cinturón de seguridad se sentó en el regazo de su mejor amigo, haciendo que éste se sintiera muy sorprendido. Virgo se acercó a Capricornio y lo beso con lujuria. Pasando ambas manos por todo el abdomen bien marcado del mayor por encima de la camiseta. Capricornio Soltaba pequeños suspiros y jadeos, pero se supo controlar y separo a Virgo, quien tenía unos ojos llenos de deseo y los labios hinchados.
- Esto está mal Virgo... - contestó Capricornio tratando de contenerse, sabía hacerlo, pero ya había aguantado mucho tiempo... Desde que comenzó con su pubertad, sueños húmedos y erecciones. - No lo está... Ambos lo queremos... Cierto? - Preguntó el menor mirando a los ojos a Capricornio. - Puede que sí, pero estas borracho, y no me voy a aprovechar de ti. - contestó él mayor. Virgo lo miró con un pequeño puchero, pero después sonrió. - no te estarías aprovechando de mi, por qué yo estoy dejando que hagas lo que quieras... ~ - comentó el más pequeño de los dos, el que aún no era mayor de edad. Capricornio estaba a punto de soltar una palabra más, pero los labios del menor atacaron los suyos nuevamente.
El chico Cabra trataba de alejarlo, pero le era imposible, una de las manos de Virgo tomó la palanca para hacer el asiento para atrás, jalándola, haciendo que Capricornio quedará completamente acostado en el asiento, y el encima suyo, aprisionándolo contra su cuerpo. Los instintos de él mayor le decían que parara, que esto iba a acabar muy mal, que ha no le hablaría, sin embargo en este momento estaba pensando más con su miembro que con otra cosa. El menor retiró su camiseta, dejándolo a la vista de Capricornio, quien contemplo aquel abdomen plano y blanquecino. Virgo tomo las manos de Capricornio y las colocó en su abdomen.
- Siéntete libre de tocar... - replicó Virgo susurrando lo de manera seductora, el mayor no se resistió más y comenzó a masajear el abdomen de su mejor amigo, parando en sus tetillas, que al contacto de los dedos de Capricornio se contraían. El chico cabra se relamió los labios y comenzó a estrujar entre sus dedos aquellos botones color rosado oscuro. El chico Virgen se dedicaba a gemir placenteramente debido al contacto de los dedos de su mejor amigo en sus pezones. Se movió causando una fricción entre ambas hombrías, haciendo que gimiera más fuerte. Capricornio ya se encontraba duro, pero sabía que todo tenía su tiempo, tomó la palanca de la parte inferior para hacer todo el asiento para atrás, y después levantar la parte en la que te recargabas, para así quedar sentado frente a Virgo, quien seguía en su regazo, sintiendo sus pezones ser estimulados por el mayor, mientras que seguía con aquella fricción de intimidades cubiertas por ropas estorbosas. Capricornio acercó su boca a uno de los pezones de Virgo, chupandolo y saboreandolo, el menor gemía y jadeaba, haciendo excitar al mayor. Mientras que una de las manos de la cabra recorría su espalda hasta llegar a la parte baja muy cerca de sus pantalones, sacándole un escalofrío a él chico Virgen.
- Ahh... Co-continu- Ahh..~ - decía entre gemidos el menor, quien comenzó a restregarse contra el pene del mayor con más fuerza, sacándole varios gemidos roncos. Capricornio metió su mano dentro del pantalón de su mejor amigo, al igual que dentro de él estorboso bóxer que vestía, tocando su trasero y rozando con sus dedos la entrada de su amigo. Sus besos fueron bajando para volver a subir y lamer todo su abdomen y cuello. Virgo comenzó a desabrochar la camiseta del mayor, retirándosela, para poder tocar y observar más minuciosamente el abdomen trabajado de su mejor amigo. Pero no le bastó, sus manos bajaron hasta el cinturón de Capricornio para comenzar a desabrocharlo, al igual que bajar el cierre del pantalón, comenzó a bajar aquel pantalón estorboso lentamente, dejando a su vista el bóxer de su mejor amigo, del cual sobresalía un gran bulto. Se quedó mirando esa zona durante unos segundos.
- Te gusta lo que ves? - preguntó de manera coqueta el mayor. El chico virgen sonrió con malicia levanto su vista hacia los ojos de Capricornio y con una de sus manos tocó su pene por encima de la tela del bóxer.
- No sabes cuánto... ~ - contestó con una sonrisa para comenzar bajar el bóxer del mayor y tocar su gran virilidad con delicadeza, tocando y acariciando el glande del pene de Capricornio sacándole algunos gemidos roncos. El mayor no se quedó tan atrás. Ya que en un dos por tres el menor no contaba con pantalón ni bóxers, estando completamente desnudo frente a los ojos del mayor, quien se relamía los labios al tener tal imagen frente suya. Sus manos acariciaron su pene y trasero, sacándole algunos gemidos a Virgo. De repente un dedo invadió en el ano del menor sacándole un pequeño gritillo de dolor. Capricornio lo besaba para acallar aquellos quejidos de dolor. Comenzó a mover su dedo estando dentro, para después meter el segundo, ahora simulando ser tijeras abriendo y cerrando sus dedos.
- Ah! ... Ca-Capri... Te quiero dentro... Por-Ahh!-favor...- suplicaba Virgo, quien no paraba de gemir, Capricornio al observar el ceño fruncido de su mejor amigo mordió su labio inferior para después meter el tercer dedo... - Aguanta un poco más... - Contestó el chico Cabra simulando dar embestidas con sus dedos dentro de la estrecha entrada del menor. Después de unos minutos retiró sus dedos, para tomar a Virgo por los laterales de su cara y besarlo de manera apasionada mientras que se introducía lentamente en el, sacándole gemidos a mitad del beso, ambos de negaban a separarse, Capricornio abrió paso a su lengua dentro de la cavidad bucal de su mejor amigo, para saborear cada centímetro de su boca, rozando ambas lenguas. Virgo comenzó a dar pequeños saltitos encima de Capricornio, quien lo tomó por las caderas para ayudarlo a ir más rápido.
- S-sii..! Ah...! Ma-más, qui-Ah! Ero más rá-pido.... - gemía Virgo en descontrol tomando a Capricornio por sus cabellos y apoyando su frente con la del mayor. Las embastadas continuaron siendo más y más fuertes y bruscas. Después de unas estocadas más el menor se vino, manchando el abdomen de ambos, y Capricornio al sentir como las cálidas paredes de su mejor amigo aprisionaban su pene, eyaculó después de dls estocadas más. Virgo cayó rendido en el pecho de Capricornio, quien al eyacular recobró sus cinco sentidos, recordándose a sí mismo que Virgo estaba muy borracho, y que mañana no recordaría nada, y si lo llegaba a recordar lo haría pasar mal por haberlo cogido. Capricornio visitó a Virgo, pero no sin antes limpiar el semen que manchaba ambos abdómenes con su propia camiseta, salió del auto cargando a Virgo estilo princesa, saliendo con el torso al descubierto. Entro a su casa y dejó a Virgo en el cuarto de invitados, y él se fue a recostarse y dormir un rato.
A la mañana siguiente Virgo despertó, recordando todo lo que pasó anoche. Sonrió para sí mismo, bajo hacia la cocina, encontrándose a su mejor amigo haciendo el desayuno.
- Buenos días. - dijo Virgo calmado saludando al mayor, quien se tensó al escuchar la voz de su mejor amigo. - Buenos días, Virgo. - contestó, tratando de sonar de la manera más tranquila posible. Virgo tocó su hombro, consiguiendo que el chico cabra se volteara, quedando a centímetros del rostro de Virgo, quien lo tomó por la camiseta y lo beso. El mayor estaba confundido, seguía borracho? O no le importaba que le hubiera dejado un gran dolor de culo? No lo sabía, pero estaba completamente sorprendido. Virgo se separó de él y al ver su cara rió.

- Pero... Tu- - Capricornio fue interrumpido por su mejor amigo.
- No estaba borracho. Pensé que era la única manera de hacerte ver que me gustabas sin que mostraras repulsión alguna. Y... Funcionó. - dijo con una sonrisa maliciosa. Capricornio lo miro y después negó, acariciando el cabello del menor. - Eres un psicópata completamente astuto... - dijo mirándolo - Pues si, te cogiste a este psicópata completamente astuto y enamorado de ti. Me gustas Capricornio. - Dijo Virgo para ser besado por su amigo nuevamente.

One Shots Zodiacales ( Yaoi )Where stories live. Discover now