La amante (Louis Tomlinson)

Capítulo 17

-¿Qué tengo que pensar yo? - dijo frunciendo el ceño

-Si le quieres hacer esto a tu ‘amada’ esposa – dije haciendo comillas con los dedos

Tenso la madibula y bajo la mirada…lo esperaba, yo estaba dispuesta hacerlo, pero no quiero reclamos.

Se quedo unos minutos en silencio, mientras yo miraba su rostro, sus labios…esos ojos, baje hasta su traje hecho a la medida, sus zapatos perfectos…

-Si – dijo mirándome – Estoy dispuesto

No me dio tiempo de contestarle porque ya tenía su lengua atrapada con la mía, cerre los ojos y lo abrace por el cuello acercándolo más, tomo mis caderas alzándome, se separo un poco y con una mano tiro todo haciendo ruido, espero que nadie lo haya escuchado, me sentó y comenzó a besar mi cuello, bajando por la loma de mis pechos desabotonando la camisa abriéndola dejando a la vista todo.

Subió mi falda con falta de delicadeza, tome su corbata acercándolo bruscamente se la arrebate y la avente, le quite el saco y la camisa, todo de una vez, toque cada uno de sus tatuajes.

Me acerque a su pecho, el me miraba atento, lo mire sonriente, baje la mirada y empece a lamer sus tatuajes.

-Oh Dios – dijo separándome – Me excitas demasiado – gruñó

Sonreí ampliamente, me tomo del cabello jalándome hacia atrás, me quito la camisa y bajo uno de los tirantes besando mi hombro desnudo.

Subio por completo la falda y empezó a jugar con el elástico de mi ropa interior, la bajo despacio, mirándome directo a los ojos, hasta dejarlos en mis tobillos.

Le quite el cinturón, el antes de que se los bajara saco un sobre plateado, sonreí y el sonrió de vuelta, le baje el pantalón, se notaba su creciente erección, la toque por encima de la tela.

Los baje dejando a la vista su grueso y grande amigo. Me recostó encima de unos papeles abriéndome las piernas, cerre los ojos esperando su grueso pene en mi, pero lo único que sentí fue su lengua en mi clítoris, gemí levemente…empezó hacer movimientos rápidos, lentos, circulares.

Cuando estaba a punto de llegar paro.

-¿Qué tal muevo la lengua? – dijo ronco, tenía la respiración agitada, lo mire con deseo 

-Excelente – dije y me beso haciéndome sentir mi propio sabor, me beso con fuerza, jalándome el labio con fuerza, me ardió un poco pero lo ignore

Se separo un poco y agarro el sobre plateado, colocándose el condón por toda la extensidad.

-Ahora si – dijo y entro en mi de un tirón, me agarre de sus hombros, me embistió de nuevo tomandome por sorpresa

Empezo a moverse adentro de mi, cerre los ojos abrazandolo por el cuello, gemía levemente, no debíamos hacer ruido.

-Me encantaría que gritarás – dijo haciéndolo despacio – Pero esto es un secreto

Lo mire y sonrió, me guiñó el ojo y empezó a moverse más rápido.

-Ah – dije algo fuerte

Me embistió con una fuerza increíble, empezó acelerar los movimientos, en círculos matándome de placer, mordí su desnudo hombro, evitando gritar.

Louis gruñó con fuerza haciéndolo muy rápido, enterre mis uñas en su espalda, hasta que sentí un espasmo y me desparrame en sus brazos…habíamos llegado al orgasmo.

Después de quedarnos un rato mirándonos mientras nos recuperábamos, nos separamos y nos vestimos, mis piernas temblaban un poco aún, sentí una palmada en mi trasero, voltee y Louis reía mientras se abotonaba la camisa.

Se volteo para tomar su corbata y le apreté el trasero…era grande, se volteo rápido y retrocedí riendo.

Intento hacerme lo mismo pero corrí, me persiguió pero me subí al sillón, me iba a caer por los tacones, me tomo del trasero apretándolo y me bajo sin soltarme el trasero, reí nerviosa, oí la puerta abrirse y Niall estaba ahí.

Me aparte rápido y baje la mirada.

-Le traje esto – dijo normal, al parecer no lo noto

Le entrego una carpeta café y Louis fue a dejarla y Niall se acerco.

-¿Aún esta en pie nuestra cita? – dijo Niall sonriendo de lado

-Claro – dije sonriendo, voltee y Louis nos miraba con la ceja levantada

-Nos vemos al rato – dijo sonriendo y saliendo de ahí

-¿Vas a salir con él? – dijo caminando hacia mi con los brazos cruzados

-S..si – dije retrocediendo, pero el seguía caminando

-¿Por qué? – dijo con un tono raro y choque con la pared

-Me invito – dije nerviosa y el seguía avanzando con esa mirada

-Hmm – dijo llegando a mi, puso una mano en la pared y la otra en mis caderas pegándome más a la pared 

-¿Qué pasa? – dije nerviosa

-Nada…- dijo y me giro dejando mi trasero pegado a su entrepierna

-Louis… - dije intentando safarme

-Espero que no sea nada más – dijo susurrando en mi oído

-No – dije algo sumisa

Me abrazo por atrás y me puse nerviosa al sentir su bulto pegado a mi trasero, empezó a besar mi cuello , la pared no era lisa, tenía textura, Louis me pegaba contra ella y me lastimaba un poco, bueno de hecho no, me gusto

Subió mi falda separándose un poco y me bajo la ropa interior, ¿qué intentaba? Escuche el sonido de un sobre romperse.

-Te voy a dar por atrás – susurro

-¿Duele? – pregunte nerviosa, no estaba segura de esto

-No lo sé – dijo riendo levemente – Pero lo averiguaremos

Temblé en mi interior, pero estaba ansiosa por averiguarlo, me separo las piernas un poco y acerco la punta entre mis nalgas, lo fue metiendo poco a poco, mi respiración ya estaba agitada…hasta que lo hizo.

Cerre los ojos, dolía un poco.

-¿Te lastime? – dijo Louis recargando sus manos en la pared contra mis manos

-N..no – dije abriendo los ojos

Continuó saliendo y entrando, me dolía pero no le quería decir a Louis, era un dolor placentero, a mi mente vino algo loco, es algo nuevo.

Narra Louis:

Quiero experimentar con Rachel todo lo que no he experimentado en toda mi vida.

-Louis – gimió Rachel

Volví a moverme lentamente, empecé hacerlo rápido prendiéndome más, le metí una muy fuerte nalgada y ella gimió, seguí haciéndolo rápido, le metí un puñetazo en el brazo y sentía como gemía, tome uno de sus pechos por encima de la tela apretándolos, estaba a punto de llegar, pero salí, la voltee y la cargue, la penetre por adelante.

-Si si – dijo tomandome de los brazos – De nuevo – pidió

La azote contra la pared con fuerza y solo hizo la cabeza hacia atrás gimiendo, la tome fuertemente de las piernas, y sentía como gemía rápidamente, mientras yo me movía rápido dentro de ella.

-Ah si – gritó bajo, le di un pequeño azotón llegando al orgasmo junto conmigo

Nos separamos y nos miramos.

-¿Te gusta el dolor? – pregunte con la respiración agitada

-No lo sé – dijo con una cara de confusión - Fue...divertido

LAMENTO LA TARDANZA. TENGO EXAGERADAMENTE MUCHA TAREA.