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Se oyen voces tras la puerta y un escalofrío recorre mi espina dorsal hasta llegar a mi nuca. Mi padre me hace una señal con la mano y sigo a mi hermana por el largo corredor que lleva al sótano, vamos deprisa, sin pararnos , ya lo habíamos practicado antes. Introduce unos números y la puerta se abre dando paso a un pasillo completamente blanco. Seguimos andando y a continuación se oye un disparo; mi corazón se detiene por un momento, puedo oir como Carmen traga saliva, nerviosa me coge de la mano y me dice:

-Todo va a salir bien.

Se que es mentira pero aprieto la suya y asiento. Ahora vamos más deprisa, casi corremos, parece que el pasillo nunca va a acabarse hasta que llegamos a unas escaleras. Las subimos despacio y con cuidado abro una de las puertas metálicas que dan al exterior, justo después oigo ruidos detras mia, mi hermana y yo nos miramos y subimos lo más rápido que podemos. Salimos corriendo, ya estamos fuera y nos dirijimos hacia el bosque tal y como habíamos planeado. Se oye otro disparo, ella se detiene, yo también lo hago. La miro extrañado, sus ojos no expresan nada y una lagrima cae por su mejilla hasta llegar a la comisura de sus labios. Empieza a caer sangre al suelo, sus manos presionan fuertemente su abdomen , como si todo estuviese en camara lenta sus piernas van cediendo haciendo que todo su cuerpo se desplome al suelo. Ahora corro hacia ella y me agacho cogiendola de la cabeza.

- Despierta porfavor, Carmen, tenemos que seguir. Papá y mamá nos esperan.

Lloro. Su corazón a dejado de latir y su cuerpo ahora solo es un simple traje sin nadie dentro. La miro, es preciosa, sus ojos color esmeralda ahora ya sin vida miran hacia la nada y con ayuda de mis dedos los cierro con delicadeza. No me percato de los tres hombres que me estan rodeando hasta que uno me sujeta del brazo y tira de mi arrastrandome hacia atras y haciendo que la cabeza de mi hermana dé contra el suelo. Quito su mano de mi brazo y me levanto secandome los ojos. Ya no caen lagrimas de ellos, ahora irradian rabia.

***

Me pongo mi chaqueta de cuero marrón, ya desgastada por el paso de los años y abro la puerta intentando hacer el menor ruido posible, inmediatamente una coriente de aire frío choca contra mi haciéndome retoceder. Oigo pasos, asi que cierro la puerta y me doy la vuelta.

-Diego -sus ojos azules me miran con un toque de preocupación y sus brazos cruzados encima de su pecho me dan a entender que realmente lo está- ¿Donde vas?

-Iba a dar un vuelta, para... relajarme.

-Si es asi- se acerca a mi hasta estar uno enfrente del otro y coge mi mano- porfavor, ten cuidado.

Asiento una sola vez y la abrazo notando su característico aroma a ropa limpia y jabón.

- No te preocupes siempre la tengo.

Deshaciendo su abrazo me doy la vuelta y me voy. Hay una capa espesa de niebla que hace que mi visión del camino sea mínimo,con rapidez me adentro entre los altos pinares intentando esquivar los obstáculos que me depara el ancho bosque hasta llegar a un enorme abismo. Me acerco, desde aqui puedo ver todo extendiéndose como una gran manta color verde oscuro ; oigo también el ruido del río que se encuentra debajo de este y el piar de los pájaros; siento, la humedad del ambiente y como el frio se apodera de mi. Me acerco al borde y miro la hora de mi reloj: 05:59, es la hora. Abro los brazos y sin ni siquiera pensarlo me tiro. Me tiro y el aire choca en mi cara haciendome cerrar los ojos mientras la gravedad tira de mi hacia el suelo. Todos mis recuerdos van pasando , ya casi no puedo respirar, me faltan pocos metros para alcanzar el fin y entonces abro los ojos.

T I M EDonde viven las historias. Descúbrelo ahora