Evan Peters y Effie Aldridge han sido vecinos desde pequeños, su relación es tan extraña , que un día se llevan mal y al otro día se llevan bien.
Sus historias se basan en travesuras y buenos momentos de amigos, hasta que comienzan a confundir sus...
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Estábamos en medio de besos y caricias, no podíamos hacer ruidos porque había gente unos metros más allá, entre ellos, mi novio.
- Evan, no podemos.- dije en un hilo, sabes que no es correcto.
Me miró y posó suavemente sus labios en los míos,y me sonrió con complicidad.
- Cariño, yo sé que esto lo deseas, intenté sacarte de mi mente todo este tiempo, inclusó pensé en volar a Australia para ir a buscarte, pero no podía ser tan egoísta.
- Sabes que esto es un error.- A quién engañaba, no podía vivir sin él,mi estúpido vecino que poco a poco me enamoró, incluso con sus bromas,sus insultos, a pesar eso, cuando estaba triste, cuando me caía, cuando alguien me botaba o me molestaba, estaba él , si él no era el correcto, entonces nadie podría serlo, ni Ryan.- Pero te amo, aún te amo y dudo que deje de amarte.
- Entonces dejame demostrarte mi amor, voy a quitar de tu cuerpo cada beso que ese imbécil te dejó.- Reí nerviosa, estaba siendo infiel y no me sentía mal, porque estaba con el indicado.- Me alegro de haber robado tu virginidad antes de ser novia de Ryan.- Evan lanzó una leve carcajada.-Comenzó a subir sus manos a mis pechos para apretarlos y sentí aquella electricidad que había perdido hace dos años.
- Oye- hablé asustada, pero después volví a reír.- Por qué haces eso.- di una palmadita en sus manos.
- Lo siento.- Evan rascó su nuca y paró.
- Eres tan tierno.- reí.- sigue así.- me lancé nuevamente a sus brazos.
Amarré mis piernas a sus caderas y él descansó su espalda en el tronco de un árbol.
Evan comenzó a besar mis clavículas, hasta llegar a la entrada de mis pechos.
Si mamá supiera que estaba con Evan, en un bosque a minutos de que él se meta en mis bragas, estaría espantada. Antes de comenzar mi relación con Ryan me aconsejó sobre no dañar el corazón de nadie. También me habló sobre mi primera vez, y que debo cuidarme , me llevó al ginecólogo y me hablaba todos los días de lo mismo, ella estaba segura que había perdido mi virginidad con Ryan, ya que jamás le conté lo de Evan,o las cosas que hacíamos en mi pieza, que son indescriptibles, como él mismo me lo dijo.
- Si usaras una falda, esto sería más fácil.- habló intentado sacar mis shorts.
- Perdón.- hablé avergonzada.
- Da lo mismo preciosa.- besó mis labios.- Hace dos años no estoy con una chica, me guardé para ti.
- No te creo.- lo miré chistosa y me sentí horrible porque yo sí tenía relaciones con Ryan.
- ¿Por qué crees que me masturbé un par de veces pensando en ti?- habló chistoso.
- Dios, qué asco...
- Te imaginé con ese bikini morado y Dios, no sabes cómo se me pa...- Lo callé con un beso.
- Basta- hablé cerca de él -mejor sigamos.
Evan logró quitarme el short y comenzamos aquello. Tenía miedo de ser escuchada, jamás pensé lo que era capaz de hacer y a veces me asustaba.
Él ya estaba dentro de mí y la verdad me alegro que en ese momento haya sido yo, porque a los minutos después me preguntó:.
- ¿Te estás cuidando? , porque no tengo condones, no pensé que tendría una aventura sexual contigo.
Quise matarlo, si andaba así por la vida, terminaría siendo papá, con hijos no deseados.
-Tomo pastillas.- hablé como una madre molesta, pues cómo podría ser tan descuidado.
Tras decir aquellas palabras, continuamos en lo nuestro, estábamos llegando a la mejor parte, Evan gemía despacio mi nombre, de forma rápida y entrecortada.
En ese momento, entre las ramas, tim nos estaba llamando.
- Mierda.- grité asustada y ajustando mi short.
- Diablos, ni alcancé a correrme.- habló bajo.- Puto Timothy.
- Pues saldremos y yo inventaré algo.- Evan tomó mi mano y salimos hasta donde estaba tim.
El rubio nos miró soprendidos, él sabía todo entre Evan y yo, pero antes de mi relación con su primo.
-¿Y ustedes?- nos miró gracioso.
- Estábamos hablando, cosas , tú sabes, inconclusas y cómo había sido su viaje.- Evan me miró.
- Es verdad tim.- acaricié el rostro de mi amigo.- No te preocupes timmy.- le sonreí y abracé.- Estamos bien.
Tim miró la mano de Evan con preocupación. Olvidándose de nosotros.
- Viejo, tú herida está sangrando.- Nuestro amigo le tenía pánico a la sangre.- Pues debes entrar a curarte.
- Oh, yo te ayudo.- Hablé mirando a Evan.- Vamos ya.
- Por cierto eff, Ryan fue a la cabaña a acostarse, estaba un poco ebrio y bueno, invitó a Ashley a domir. Duermen en camas separadas. Si eso te molestó.
Qué gran hijo de puta, me rompe los huevos porque está celoso de Evan, pero resulta que él invita a cualquier perra a domir en la cabaña que además era de Evan.
Llegamos al lugar y curé la herida de Evan, era no tan profunda, pero muy extensa.
Cuando terminé aquella labor, pensamos en cómo domir.
- No dormiré con Ryan esta noche.- hablé firme.- Está ebrio y la verdad es que no comprendo cómo invita a esa chica a la casa.
- Estás celosa.- bromeó Evan. Y lo asesiné con la mirada.
- Entonces dormiremos los tres en la pieza que sobra, la cama alcanza para los tres, además es la pieza de Evan, su cama es de las grandes.
- Cómo digas tim, yo acepto.- habló Evan, mirándome y con su lengua contra los labios, de forma sútil.
- Bueno.- la verdad me daba un poco me miedo, no sabía como reaccionaría Ryan, él últimamente se enojaba mucho.
《...》
Estábamos los tres , acostados y abrazándonos los unos a los otros.
Yo estaba en el centro, Evan a mi izquierda y tim a mi derecha, parecíamos chicas superpoderosas, los dos me abrazaban y yo sólo me sentía feliz por estar con mis amigos, los había extrañado demasiado.
... En la madrugada sentí como se abrió la puerta de la habitación.
- Lindo trío, eh.- Era la voz de Ryan.- Eff, ven conmigo, por favor.
