Historia de los reinos: rebeldes

Entrenamiento

L

Tras la respuesta de Tyler solo sonrei suavemente, por una vez mis conocimientos de medicina habían servido... Aunque fuera solo para salvar una persona. Mire de nuevo la piedra de un blanco puro... Este pequeño objeto me podría dar un poder, algo increible. Quizás pudiera volver al pasado y detener ese efecto domino de asesinatos que ocurrieron en solo una semana y todo por mi culpa, bueno, la mia y la de unas pastillas.

—Vamos al centro de trabajo a encontrar algo que hacer?— pregunte rompiendo el silencio que se había formado en el rellano. Tyler asintió y fuimos hacia este. Dijimos los trabajos que hicimos y nos dieron los recomendados para nosotros. Aproveche el que Tyler se distrajo y pregunte

—Sabes donde esta Collin?— pregunte a la recepcionista con esperanzas de poder hablar con el, explicarlo todo. Ella solo me respondió que estaba fuera. Tendría que esperar para explicarme. Decidi que si quizas estaba en la ciudad del Paramo, quizas podria encontrarle. — Donde esta exactamente— interrogue a la recepcionista que respondio solamente "Dersan". El estaba en otro reino?

Deje a Ty en las fraguas y me dispuse hacia el trabajo que escogi para hacer el edificio de al lado habitable. Mientras andaba hacia ahi decidia que palabras deberia decirle a Collin en cuanto volviera de Dersan. "Siento ser la causante de todas tus heridas y de que estes aqui, podemos hacer como si nada paso?" fue la mejor idea que se me ocurrio

K

No tengo ni idea de que se supone que era un entrenamiento para Hailey pero al menos para mi uvas y varias pelotas no tenian sentido. Las estabamos subiendo hasta la parte mas alta del edificio.

Ya ahi arriba se podia ver la ciudad entera. La ciudad del Paramo era enorme, tanto que tardarias incluso mas de un dia de recorrerla desde un punto hasta otro. Hailey nos conto al llegar que se considera que esta ciudad era la capital de la zona desertica, aparte de ser un gran lugar para ir de vacaciones. Levante la cabeza y observe el cielo estrellado y pense en la infinidad que hay ahi arriba y nadie que haya intentado investigar desde hace años.

—Vale, Ethan ponte ahi— dijo Hailey señalando a la unica pared del sitio, esto me aparto de mis pensamientos, bajandome de las estrellas al mundo real. —levanta esto— dijo refiriendose a un racimo de uvas que se apoyaban en la mano de la pelirroja. Ethan puso cara de concentracion y tras un rsto consiguio levantar las uvas tal y como pidio Hailey.

La chica sonrio al ver las uvas flotar y al segundo saco de la bolsa quw habia subido diferentes pelotas, desde de goma hasta de baseball cada una mas dura que la anterior.

—Piensa rapido— dijo la chica y le lanzo al chico la pelota de goma que reboto en la pared pasando al lado de la cara del cientifico. Mire extrañada a Hailey — Es parte del entrenamiento— dijo ella sencillamente y paso a la siguiente pelota para lanzarla.

Aunque Ethan parecia concentrarse no consiguio parar ninguna, todas rebotaban cerca suyo aunque Hailey aseguraba que estaba apuntando a su cara. En la siguiente que lanzo, la penultima, me di cuenta de que Ethan estaba desviando las pelotas en vez de pararlas.

—Enano, deten una de una vez!— grito Hailey ya cansada de que el no hiciera nada en su opinion. Lanzo estaba vez la de baseball. Ethan paro esta vez la pelota. La pelota se lanzo hacia Hailey pasando a su lado, despues volvio a su posicion original en la bolsa.

—Contenta? Consegui detener una pelota de baseball en movimiento tal y como tu querias— dijo Ethan con una pequeña sonrisa burlona ante Hailey que seguia sorprendida, parecia que la pelirroja estaba procesando la informacion.

Tras un rato ella bajo, tenia trabajo que hacer al haber vuelto los reclutadores. Me sente junto a Ethan en el bordillo del edidicio mirando a la ciudad y sus luces

—Recuerdas cuando llegamos los tres aqui?— pregunto el con su mirada perdida en el paisaje, las luces se reflejaban en sus ojos azules verdosos. Entonces recorde el priner dia, cuando Hailey era rubia y el castaño.

— Aun lo recuerdo, tras comprar los tintes y la capa para ocultarnos, fuimos al primer edificii vacio que encontramos. Aun recuerdo ver por primera vez el amanecer en esta ciudad.