Capitulo tres ||ojos verdes grisáceos en el medio de la oscuridad||

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Oscuridad y mas oscuridad, no podía ver más halla.

Caminaba intentando lograr ver alguna luz que iluminara el lugar, pero eso no paso.

Comenzaba a desesperarme, era como si tuviera mis ojos cerrados y no pudiera ver absolutamente nada.

Comencé a correr sin rumbo alguno, con la esperanza de encontrar a alguien que me dijera donde estaba, y que estaba pasando.
Pero no había nada,ni nadie, era muy parecido a la nada misma.

-Nathan!!!- grite en un intento de llamar a mi hermano, pero sentí que era inútil, jamas me escucharía, estaba sola en un mundo repleto de oscuridad.

Cerre mis ojos por unos minutos, al abrirlos me tope con unos oscuros ojos verdes, que me miraban fijamente con frialdad.

Quería apartar la mirada pero no podía, no podía dejar de mirarlos.

Me inspiraban temor, enojo, dolor y tristeza, una tristeza muy profunda.

Me acercaba cada vez más a esos ojos cuyo color no eran solo verdes, estos tenían pequeñas pintitas de color gris.
Eran únicos, jamás los había visto, pero quería saber de quién eran esos ojos tan hermosos que ocultaban oscuros secretos.

Sentía una terrible necesidad de encontrar la persona a la que le pertenecieran esos ojos.

Cuando intente acercarme un poco más, voces comenzaron a susurrar cosas.

-alejate de el-

-es peligroso -

-no confies en nadie-

-protegelos-

Los susurros se hacían cada vez mas fuertes, hasta que se convirtieron en gritos.

-ALEJATE DE EL!!!-

...

Abrí mis ojos tan rápido como pude, mi respiración estaba agitada y mi corazón latia a mil por hora.

Intente calmarme un par de veces hasta que lo logre.
Aunque no podía quitarme de la cabeza aquellos ojos verdes grisáceos tan hermosos.

Sacudí mi cabeza y me Levante.
Recorde que era lunes y debía ir al colegio, así que tome mis jeans azules y mi blusa roja. Tarde unos minutos en alistarme, pero no tanto como siempre.

Baje en busca de mi hermano pero no estaba, lo cual se me hizo bastante raro.
De todas formas supuse que debía irme caminando.

Tome mi mochila y me fui, rumbo al colegio.

En el camino, se me cruzaban miles de preguntas que me volvían loca.

¿porque soñaba solo con unos ojos?
¿querían advertirme de algo?
¿De quien se trata?
¿debía encontrar esos ojos?
¿O acaso debía alejarme de ellos?

Entre pregunta y pregunta, logre llegar al colegio mas rápido de lo que pensé.

Entre y divise a nathan, mi hermano, junto con alice, su supuesta novia, y peter, su mejor amigo de toda la vida.

Me dirigi hacia ellos, y al verme nathan se dio la vuelta para irse, pero peter lo jaló de la remera haciendo que este volviera a su lugar.

-veo que no me esperaste - me queje, refiriéndome a que el debía traerme al colegio en su coche como siempre, pero no lo hizo.

-lo siento, pero le había prometido a alice pasar temprano por ella - me sonrió apenado.

-ya lo note, la próxima me avisas - me volví a quejar.

-si, lo siento -

-no te preocupes kate, le estaba diciendo a nathan que yo pasaría por ti, así el tiene tiempo para ocuparse de alice, que te parece?- pregunto peter

-me encanta la idea!!-chille-gracias hermano que debi tener - le sonreí y nathan cambio su cara a una de enfado.

Peter siempre se a comportado como mi hermano mayor, de echo nos llevamos muy bien, aunque últimamente hemos estado muy alejados.

Susurros de la oscuridad (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora