Los Mil y Un Hijos de Taeyong ↬ ɴᴄᴛ ᴏᴛ21

🌱 ~ De Taeyong y sus Mil Hijos

Érase una vez, hace mucho tiempo, en una tierra muy muy lejana, existía un reino llamado 'NCT', el cual era gobernado por un bondadoso -y algo tonto- rey, éste tenía a un lindo, cariñoso y perfecto esposo...

—Mejor dicho, un regañón y amargado esposo.

—¿Apoco Doyoung aparece en la historia?

Los reyes de NCT tenían una hermosa y feliz familia conformada por ellos y sus 14 guapos y fuertes hijos...

—Asuuu, 14 bendiciones, ¿qué eran, una familia de conejos?

—A eso yo le llamo no tener nada que hacer.

—O tener una puntería que Messi desearía.

—O no tener televisión.

La familia vivía en un enorme y hermoso castillo, con tantas habitaciones que era posible perderse. Tenía un jardín inmenso, lleno de las más únicas y bellas flores que han existido. Dentro del castillo había un salón de baile, una cocina del tamaño de una isla, las paredes decoradas con adornos de oro y plata...

—Más bien, una casa del infonavit en el barrio menos chungo de la ciudad, con una mini cocina, un solo baño, una sala de estar, 3 habitaciones y el jardín lleno de cacas del perro.

Un día el mayor de los hijos, el Príncipe Yuta fue capturado por...

—Andar acosando a Sicheng... O por estar viendo Hentai.

—Donghyuck ya cállate, déjanos escuchar la historia de Papá Taeyong.

—Cállame cuando me mantengas.

—Pues te mantengo hablando.

—¡Renjun! ¡Donghyuck! Dejen de estarse peleando, y si me vuelven a interrumpir no seguiré con el cuento.

El Príncipe Yuta fue capturado por la Bruja Malvada. Entonces sus hermanos, el Príncipe Kun y el Príncipe Doyoung fueron a su rescate sin saber que la Bruja les tenía preparada una trampa y los encerró en un calabozo.
Los reyes al ver que sus dos hijos no regresaban decidieron mandar al mejor de sus guardias, que también era su hijo, el Príncipe Jaehyun...

—Ahí si ya no te la compro jefa, el Jaehyun está bien pende-

—¡Suficiente!— Taeyong se levantó de la orilla de la cama en la que se encontraba sentado —Ahora duérmanse que mañana tienen que ir a la escuela.

—Muchas gracias, Donghyuck— dijo Jaemin con sarcasmo y su hermano le respondió de igual forma.

Taeyong arropó a los niños y les dio a cada uno un beso de buenas noches.

Musitó un «Dulces sueños» apagando la lámpara, que era la única fuente de luz en la habitación, y abandonó ésta.

Justo frente a la recámara de los pequeños se encontraba la de sus hijos mayores, entró para darles las buenas noches y de paso inspeccionar qué hacían.

Taeyong pegó un salto y soltó un grito digno de un Oscar al mejor actor, cuando al momento de poner su mano en la perilla de la puerta alguien la abrió del otro lado y en medio de la oscuridad vio una figura alta con la cara negra.

—Buenas noches, papá.

Aquella figura prendió la luz y Taeyong descubrió que era nada más y nada menos que el mayor de todos sus hijos, Yuta, con una mascarilla de carbón en el rostro.

—Ay Yuta, no hagas eso, casi me da un infarto.

—Ja, eres tan feo que hasta asustas a papá— se burló Kun, ganándose un almohadazo por parte de su hyung —Aguanta, estoy leyendo 'Harry Potter y el Prisionero de Azkaban', muggle— y devolvió el golpe y éste le fue regresado, y así sucesivamente.