En la guardería ~Bts~

O7~

                    Jungkook                
  Estaba en la espalda de Iron Man mientras él —mi súper héroe favorito— volaba por los cielos a tal punto que sentía tocarlos. Y un momento pasó en mares tan trasparentes que podía ver los animales acuáticos.

  Se sentía super viajar en su espalda del mejor ser humano de todos, Tony Estar es el inventor de la historia.

–Kookieeee~.–

  De repente todo se volvió negro, y unas manos tocaban mi cabello castaño. Abrí mis ojos y vi que no estaba con Iron Man ni mucho menos volando por los mares del atlántico, sino que en el auto de mis papis en el asiento de atrás con mi juguete de Iron Man.

  Lo más cerca que puedo estar con él.

–¿Mamii?.– pronuncié y me levanté del asiento para llegar al asiento del copiloto –¿Ya llegamos?.– pregunté sentándome en su regazo y ella me abrazó

–Pronto, mira lo linda que es Seul.–

  Miré por la ventana lo que era la entrada a Seul, había un letrero con letras en color amarillo, decía: "Bienvenidos inquilinos a Seul". Luego de pasarlo se veían personas caminando por los lugares, autos bien bonitos y brillantes ser conducidos por las calles, y las tiendas tenían grandes carteles coloridos de ofertas.

–Ya llegamos pequeño.– avisó papi por lo que miré nuevamente a la ventana

  Una casa muy grande ante mis ojos, de color blanco con azul claro; las ventanas pintadas de un amarillo radiante y la puerta pintada de rojo. Los que trabajan para papi sacaron las maletas y mi mochila del maletero y mi mami me sacó del carro a mí y a Iron Man.

  En los brazos de mamá me llevó dentro de la casa y era mucho más grande y espaciosa que la antigua. Mamá me dejó caminar por la sala y tenía alrededor de 4 ventanas, me senté en el suelo y usé mi imaginación para sacarme del aburrimiento.

(…)

  Ya para la hora del almuerzo mami cocinó kimchi con varias salsas para darle sabor, ramen condimentado con sal y pimienta negra, y una botella de champaña para mis papis mientras yo tomaba jugo de naranja.

–La cena te ha salido deliciosa como siempre, cariño.– halagó papi besando su mano, que romántico

–Gracias cariño, he practicado mucho en esto de la cocina.– dijo sonriendo, mostrando su dientito de enfrente chueco –Aún se me hace un trabajo difícil.–

–Tranquila mamii~ cuando sea un niño grande y fuerte aprenderé a cocinar para ayudarte.– prometí sintiéndome orgulloso de mis palabras

–Jajaj, gracias Kookie.– ¿por qué se ríe? –Y por ser un buen niño y un excelente estudiante, cociné tu comida favorita– dijo y mis ojitos brillaron

–¿Hablas de..?.–

  Mamá caminó hacia la cocina, y cuando regresó tenía un plato de... ¡Siiiii!.

–¡Costillitas de cordero!.–

  Cambió mi plato por el de costillitas; se veían deliciosas y su sabor... Creo que estoy babeando. Tomé con mis manos mi comida favorita en todo el mundo y comencé dando mordiscos pequeños para disfrutar este manjar dentro de mi boca.

–Edta delitvhoso mami.– halague mientras comía, ambos papis se rieron por mi reacción antes mis costillitas de cordero

  Y quizás sea raro ver a un niño de 7 años coma un plato entero de costillas sin ninguna salsa para ablandar la carne dura de esta, pero mis dientes no lo necesitan.

  Casualmente tengo dientes de conejo y todos se reían pero a la hora del almuerzo se sorprendían al verme comer. Soy muy rápido.

–Terminé.– dije aplaudiendo contento

–Me alegra cariño, ahora debes darte el baño de las 21:15 para dormir fresco y limpio.– comunicó papi para elevarme entre sus brazos y llevarme a mi nuevo cuarto –Prepara tu ropa y devistete mientras yo preparo el agua caliente, ¿sí?.–

–Si papi.–

  Cuando papá salió de mi cuarto busqué mi pijama de banana del armario; ah cierto, no les dije. Los hombres de traje tomaron las maletas y ordenaron todo como indicó papá, mientras yo jugaba con mi Iron Man.

  En fin, encontré mi pijama y la dejé en mi camita para empezar a desvestirme hasta quedar en mis calzoncillos azules, me tapé con mi toalla y caminé hacia el baño donde papi tocaba el agua.

  Aún tapado caminé hasta él y toqué su codo, se dio la vuelta para mirarme y sonreír.

–El agua está lista, bañate y cuando quieras salir avisame.–