NUNCA ES TARDE

La felicidad del fin de semana

El fin de semana estuvo acompañado de muchos buenos momentos, mucho amor,  y sobra decir que de muchos momentos de lujuria, quizas no lo sabian, pero despues de tanto añorarlo los cuerpos de ellas gritaban forticimamente cuanto se necesitaban mutuamente y cuan fuerte era el deseo contenido en ellas, este fin de semana fue la gran señal de esto, pues ninguna de las dos se reprimio, tanto asi, que se les hacia imposible alejarse una de la otra, quizas , este lugar seria su mejor recuerdo finalmente, se convertiria en el ejemplo ideal de como aprovechar adecuadamente un espacio privado, un paraiso solo para dos.

Tanto asi, que no solo la sala principal fue testigo de su amor, claramente tambien lo fue el cuarto principal, el baño de aquel cuarto, las escalas que conectaban el primer y segundo piso, oh esas escalas, quien se podria imaginar todo lo que se podria hacer alli.

Antes de contar esta historia, cabe aclarar que si sucedio lo que paso en las escalas, fue totalmente inocente, inicialmente, pues empezo como un juego, un simple juego que cambio de matiz. 

Valentina acababa de levantarse, y cuando comenzo a estirar sus brazos noto...ausencia...mucho espacio, el vacio, con panico se puso de pie y busco con su mirada preocupada donde pudiera estar su juliana, la invadio el panico, sintio terror, imagino que se habia ido sin nisiquiera una nota de despedida, entonces fue en ese momento que salio disparada de la habitacion y bajo rapidamente por las escalas, para dirigirse a la puerta principal, fue entonces que en ese momento sintio que alguien la llamaba.

- Oyeme! Tu para donde crees que vas?! -  Valentina se sobresalto, y giro, justo alli estaba su juliana, su alma volvio a su cuerpo, parada y con mirada confundida juliana la contemplaba, mientras vestia unos cortos shorts y un delantal que permitia dar a entender que antes estaba en la cocina.

-eh... -dudo valentina - te iba a ir a buscar-dijo timidamente- pense que te habias ido sin despedir. - concluyo totalmente avergonzada.

-y porque deberia irme sin despedir, morrita. Si a tu lado me siento plena. - dijo Juliana. -ademas, te dije que me gusta el desayuno, y eso estoy haciendo.

La cara de valentina se ilumino de alegria. Ah queria saltar de la emocion pero cuando se estaba acercando a juliana esta la detuvo, sorprendiendo a Valentina.

- pero primero lo importante-dijo juliana - ve y busca algunos zapatos que ponerte, con el frio que hace aqui te puedes resfriar, apurate. - direcciono a valentina con nalgada incluida.

Cuando valentina subia las escalas, tropezo y cayo alarmando a juliana que como pudo alcanzo a coger a valentina, pero no conto con la suficiente fuerza y cayeron juntas, la verdad no fue una caida peligrosa.

Abrazadas cayeron abrazadas... Sanas y salvas, pero asustadas, del susto llegó la risa. Mientras se miraban con el cabello enredado no paraban de reír.

-vaya morrita, si no estoy te matas- le dijo juliana a Valentina. Pero la rubia solo la miro con una gran sonrisa y la beso.

Ese beso fue tierno. Y suave pero entre besos y caricias la temperatura fue aumentando mientras seguían en la base de las escaleras. Cada vez era más necesario los besos que el aire, No se detenían, en ese momento a ambas les dejo de importar que estaban en las escalas casi en la entrada de la casa, y el calor invadió sus cuerpos tanto que la ropa les estorbaba, y empezaron a quitarse la ropa mutuamente con desespero... Pasión... Cuando estaban sin ropa y valentina sobre juliana.

Knock knock...

El pánico. En sus miradas...

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Hola, siento dejar este capitulo así. Pero el suspenso le da gusto a la vida.

Espero leer sus comentarios.