Qué Sé Yo

No siempre las cosas son lo que parecen.

A veces, solo a veces, pensamos que tenemos el control.

Disfrutamos el momento, posteamos una foto, tomamos un café. ¿O tomamos el momento, posteamos un café y disfrutamos una foto?

No siempre las cosas son lo que parecen.

Las redes sociales son una ventana al mundo, nos permiten descubrir cosas que jamás veríamos de otra forma, conocer, aprender, relacionarnos. Hablar, escuchar y hasta amar. Pero, ¿atraviesan esas pantallas el amor o el odio? Es difícil distinguir.

Un chiste, una risa, un like.

¿La persona se está riendo del chiste, o le da like para no quedar afuera? ¿Le causó gracia o le causó dolor? ¿Fue un chiste gracioso o una broma pesada?

No siempre las cosas son lo que parecen.

A través de las pantallas se puede reír, llorar, gritar, amar, odiar, querer, desear, envidiar, anhelar, sonreír, disfrutar, enojar, agredir, derrochar.

Y al leer estas palabras, parecería claro cuál es la categoría de cada una. No sería difícil separarlas en una lista de "bueno" y "malo". Pero, ¿dónde queda el sentido?

Tal vez estamos hablando de reír de nervios, de gritar pasión, de amar el dinero y de odiar el rencor. De querer lo indebido, de desear lo prohibido, de envidiar la paz y anhelar el olvido. De sonreír por el fracaso, de disfrutar la agonía, de enojar al agresor y de agredir la ironía.
¿De qué estamos hablando al mencionar "derrochar"? Se puede derrochar dinero, pero también se puede derrochar amar.

No siempre las cosas son lo que parecen.

¿Nos sentimos más cómodos en una red social que permite que por 24hs muestres lo que quieras? ¿O nos sentimos incómodos en una vida real en donde sos lo que sos por un día y más?

¿Nos sentimos amados en un espacio en donde subimos una foto y nos llenamos de likes? ¿O nos sentimos odiados en un mundo en donde cada paso que das te lo critican?

¿Nos sentimos realizados cuando subimos que estamos en pareja, o nos sentimos así en realidad al llegar a los 70 años de la mano de nuestro primer amor?

¿Nos sentimos escuchados en un sitio en donde escribimos lo que pensamos y nos aplauden? ¿O nos sentimos ignorados en un grupo en donde ni gritando te toman en cuenta?

No siempre las cosas son lo que parecen.

No tuve ni que mencionar cada una de estas redes, para que cada una de ellas se te vengan a la mente. No tuve ni que decir sus nombres, ni que hacerles publicidad.
Eso es porque estamos siendo mentalizados en que cada una de estas redes sociales son recursos para "mostrar lo que somos" cuando en realidad estamos subiendo un perfil de lo que querríamos ser, con nuestro nombre arrobado.

Aparentamos ser lo que queremos ser, cuando no somos ni la mitad.

¿Cuántas veces sonreíste más esta semana: con una cámara adelante o mirando el atardecer? ¿Leyendo un post de un desconocido o leyendo un libro? ¿Sentándote cómodo en la idea de que ya sos quien decís ser o trabajando duro para conseguirlo?

Mostrame tus perfiles en internet, y te diré quién no eres.

No siempre las cosas son lo que parecen.