¿Corazón o mente?

Capitulo 2

Al otro lado de la ciudad de Quito en un alto edificio lleno de ventanas de cristal se encontraba un hombre muy guapo de 1.8 m, ojos azules y cabello negro lacio. esta vestido con un traje hecho a medida negro . El esta sentado en un escritorio de palisandro firmando y analizando documentos. El es el Ceo de la corporación MK. Douglas Macferson. Hay muy pocas personas en la ciudad que no hayan escuchado sobre el. Es un muy buen empresario y también el soltero mas codiciado de la ciudad, lastima que sea un playboy y que tenga un montón de amantes, pero nada serio. 

El silencio en la oficina fue roto por el sonido de unos tacones repiqueteando en el suelo. era la secretaria de Douglas, el levanto la vista y observo a una mujer curvilínea  rubia y con ojos verdes que tenían un brillo de inteligencia. ella se inclino para dejar algunos papeles e informarle de sus citas para el día de hoy, todo muy profesional si ignoras los grandes pechos que quedaron a la vista cuando lo hizo. Douglas les dio una mirada y luego le pidió que se retirara. Hay políticas de no relaciones con los empleados después de todo. Después de eso entro una rubia muy sexi. el le dio una mirada, de repente se sintió un poco de malhumor, porque lo intentaban seducir a cada rato, aunque le gustaba la rubia y era buena en la cama ya le había comenzado a hartar su actitud tan pegajosa. Y fue aun peor cuando ella dijo.

-Amor no me has llamado en esta ultima semana. pensé que podríamos ir a cenar y a divertirnos el día de hoy en mi casa.- Dijo la rubia.

- No estoy de humor hoy dije-Esta mujer ya había rebasado los limites y lo hizo aun peor.

- Bueno amor no hace falta ir tan lejos- Dijo con un tono ronco y seductor mientras se sentaba en mis piernas . Eso me cabreo, esta mujer no había entendido la regla de no aparecerse en mi trabajo o que?. la empuje sin ningún tipo de educación.

-No te he llamado porque te dije que quería terminar- Después de eso tome mi chequera y le di un cheque por 5 millones de dólares.

-Espero que con esto sea suficiente, ahora vete- Ella comenzó a llorar después de oírme decir esto y me intento abrazar. Yo la esquive.

-Porque ya no me quieres?. Yo te amo- ella dijo.

- Yo a ti no te amo y te lo deje muy en claro cuando comenzaste a ser mi amante y que nunca lo haría, no es mi culpa si no entendiste mis palabras. Ahora vete o llamare a seguridad, y me harás  enojar, y créeme no quieres ver eso-Después de escuchar eso y ver mi cara malhumorada se puso pálida tomo el cheque y salió corriendo. Di un suspiro de cansancio y me senté en mi silla antes de escuchar la voz de mi amigo Fausto diciendo.

- Douglas, acabo de ver a una rubia sexi salir corriendo de tu oficina. Todo un rompe corazones como siempre, espero que no olvidaras nuestra merienda juntos verdad, Peter dice que ya esta en el restaurante- Dijo con algo de burla y diversión ante mi cara de que fastidio y cansancio.

-No es mi culpa que nunca entiendan cuando un hombre solo quiere pasar el rato con ellas. Cada vez se vuelven mas fastidiosas y engorrosas- Dije

-Bueno, no te das cuenta que todas ellas van hacia ti por que se quieren casar contigo?-Dijo Fausto. El era un rubio con ojos negros, 1.75 m y con una personalidad demasiado risueña para ser el Ceo de JK, un consorcio de computadoras internacional.

-Si claro, sus intenciones son tan puras. Ambos sabemos que solo están tras mi dinero. Si se están vendiendo por lo menos que no se hagan las inocentes y finjan amarme.- Dije fríamente.

-Bueno no todas pueden ser tan buenas amantes como Cat. Ella fue la que te duro mas. Un año eso fue bastante tiempo para ti. No te pedía nada, no iba a tu trabajo, en resumen era muy obediente, no entiendo porque la dejaste- Dijo mi amigo mirándome con cara de, ya encontraste lo que querías y luego lo tiraste entonces porque te quejas?.

- Ella ya no era tan divertida, la obediencia absoluta aburre también- Dije mientras tenia un recuerdo.

Hace dos años

-Douglas ¿Quieres romper?- ella me pregunto en cuanto vio el certificado de propiedad de una casa en la ciudad y un cheque por 20 millones de dólares. A ella le gusta ese numero por alguna razón, así que me pareció una buena cantidad. Respondí.

-Si, creo que hemos estado juntos por algún tiempo, la novedad ya paso- La verdad es que no quería darle ideas de que esta relación era mas, aunque ella no parecía tenerla.

-De acuerdo, te devolveré las llaves del coche, de la casa y la tarjeta de crédito, recogeré mis cosas y mañana mismo saldré de aquí-  Respondió muy calmada y luego se dio la vuelta.

- Bye bye- Dijo mientras subía las escaleras, después de verla me quede un rato ahí y luego me di la vuelta y salí de esa casa en la que había pasado tanto tiempo con ella no solo en la cama sino también a veces charlando y descansando, debo admitir que ella fue buena compañía tanto en la cama como fuera de ella.

Volví al presente después de recordar y bueno debo de admitir que la extrañe un poco. Pero ella era demasiado obediente. Casi como un robot, eso era lo único que aunque parezca irónico y tonto de mi parte de pensar me molestaba de ella un poco. Incluso ese día pensé que ella se molestaría o intentaría convencerme de que cambiara de opinión, pero ella ni siquiera parpadeo como si fuera algo esperado y que no le traía ningún problema.

-Vamos al restaurante ahora o Peter nos matara- Le dije a fausto y luego comenzamos a caminar fuera de la oficina.