Frívolo

01

12/03/19

"Te dejó un recuerdo"
"No me olvides"
"Te extraño"
" Te amo"
"Adiós"

Si
Esas fueron tus últimas palabras
Las últimas cartas que escribiste, la última carta que llego a mi buzón, que tenía un sello de cera con letras en la misma que decían tu nombre.

Esas cartas, alimentaban mi alma
Me imaginaba que aún llegaban, que aún me recordabas.

Me ponía a pensar en ti
En tu sonrisa
En el color de tus ojos y el brillo incomparable.
Ni las estrellas brillaban tanto.

Ni siquiera el, te amaba tanto.

Los días después de tu partida me dediqué a observarte, de lejos.
No
No de esa forma
No te acosaba
Solo te protegía
Me aseguraba que estuvieras bien
Que nada te faltara.

Deje de hacerlo cuando supe que era una nueva obsesión.
Deje de hacerlo cuando ni siquiera yo mismo me sentía cómodo haciéndolo.

Deje de hacerlo cuando me di cuenta que ya eras feliz. Que no me necesitabas.
Que ni siquiera me extrañabas

Simplemente deje de hacerlo.
Porque quería dejar de lastimarme a mi mismo,
Viendo tu felicidad con otra persona.

Siempre pensé
"Que lo que tenga que pasar pase contigo"

Pero nunca pensé que
"Que lo que tenga que pasarme sea por ti"
Tendría más impacto en mi.

Y es que eras esa persona, ese secreto, que me hacía sonreír el corazón.
Que me llevaba al país de las maravillas.

Fui un tonto al pensar que dejándote ir, serías feliz.

Después me di cuanta de mi error. Después me enteré que me amabas  tanto  como yo a ti. Pero también, supe que era injusto alterar tu realidad de nuevo.

Cuando me enteré de el porque, de tu falta de cartas. Me destroce
Quería morir.
Quería hacer sufrir, al responsable de tu propio sufrimiento

Cuando me entere que estabas en el hospital.
Con la vida al borde de la muerte, me maldije a mí mismo por no cuidarte.
Por no evitar ese accidente

Cuando me enteré de tu estado

Cuando tu madre me llamo por teléfono con un hilo en la voz por el llanto, diciéndome que estabas muerta
Mi mundo se vino abajo

La sensación de impotencia
Invadía mi cuerpo de una forma apabullante.

Después de eso
La ultima imagen que me llega a la cabeza es tu cara, del otro lado del cristal
En una caja de madera.

Tu cabello, ligeramente despeinado
Y tus ojos celestes cubiertos por las largas pestañas negras que adornaban tus párpados.

Mantenía la esperanza viva
Aún creía que era un sueño, una pesadilla de la cual iba a despertar tarde o temprano rogándole a la vida que fuera una broma pesada.

Rogando por una segunda oportunidad

Pero no llego

Después de eso
Me la pasaba dentro de tu habitación, esa que dejaste tal cual, antes de irte. Con tus juguetes favoritos de cuando éramos niños
Con las fotografías de nuestros cumpleaños juntos
Con las cartas que te escribí todos y cada uno de los San Valentínes en casa de tus abuelos
Esa misma que contiene tu aroma.

Desde entonces te escucho
Todos los días en la cocina, y te imagino intentando tomar un vaso de la estantería superior
Te imagino cantar a todo pulmón en la regadera
Y correr de un lado a otro buscando tu maquillaje
Te imagino levantándome para desayunar
Y recordándome cuando tengo un evento importante

Te imagino todos los días
Siendo tu
Estando aquí
Conmigo
Te imagino a mi lado.