En el transcurso de los cinco días siguientes, Jooheon tuvo problemas para levantarse de la cama. No le llamaba "dormir" a sus momentos de descanso, pero Changkyun se preocupó de todas formas, sintiendo la ansiosa inquietud de ver como los últimos granos caían e su relo de arena imaginario.
Changkyun trato de ignorar aquel comportamiento lo mejor que pudo. Su corazón latía de emoción cada vez que veía a Jooheon levantarse y salir de la cama. Sus besos eran más dulces que nunca aquella semana. La sonrisa de Jooheon era tan contagiosa y su risa tan brillante que Changkyun no se percató del brillo atenuado de sus ojos hasta que fue demasido tarde.
El quinto dia era un miércoles, Changkyun siempre lo recordaría. Acababa de atravesar la puerta principal, con la mochila todavía sobre sus hombros, cuando la débil voz de Jooheon lo atrajo hasta el dormitorio.
—Changkyunnie... –Se quejó. Por su aspecto, no se había levantado de la cama todo el día. Estaba en la misma posición en la que Changkyun lo había dejado por la mañana, salvo que ahora Jooheon parecía estar sufriendo.
El fin esta cerca.
—Estoy a... quí –dijo Changkyun, sentándose en la cama junto a él. Su estómago se agitó de angustia al ver el rostro de Jooheon. El terror invadió cada fibra de su ser cuando Jooheon continuó hablando.
—Me... Me duele todo. ¿Qué me esta pasando?
—No lo sé... –Changkyun acarició su mejilla con la mano. Su piel estaba más fría que la vez en la que se había desplomado frente a sus ojos. Era aterrador y el cuerpo de Changkyun reaccionó en consecuencia, quedándose casi sin respiración.
—Esto no puede ser... –dijo Jooheon de repente, tratando de abrir los ojos.
Changkyun no pudo apartar los ojos de su rostro cuando Jooheon no fue capaz de enfocarlo con la mirada.
—No hemos tenido tiempo suficiente... No puedo irme ahora.
—Jooheon... –Changkyun coloco la mano sobre sus labios. No soportaba que siguiese hablando. Sus entrañas se retorcieron de incomodidad y un escozor familiar comenzó a invadir sus ojos. Aquello era todo.
—No puedes luchar contra esto... No podemos luchar contra lo que sabíamos todo el tiempo que pasaría.
Las lágrimas nublaron su vista y se ahogó con sus propias palabras. Se secó las lágrimas con violencia, indignado por sus propios sentimientos. Tenía que mantenerse sereno por Jooheon. La última imagen que Jooheon tuviese de el no podía ser goteando en todas partes.
—Changkyunnie... –Jooheon buscó sus manos con las suyas y Changkyun tomo las suyas firmemente. —Yo... durante mucho tiempo o supe porque había sido creado. Ahora comprendo que... que fui creado para ti y solo para ti. Nunca me había imaginado que encontraría a alguien que me haría sentir tan... tan humano. Lo siento...
—Shhh... –Changkyun beso sus manos, asegurándose de no tocar su piel con sus lágrimas. No quería hacer las cosas más difíciles de lo que ya eran. Una parte de el agradecía que al menos los ojos de Jooheon permanecieran cerrados.
—No me olvides, ¿de acuerdo? –continuó Jooheon Joven con voz forzada. —Puedes amar a otras personas, tal vez incluso más que a mi, pero no...
—Nunca. –juro Changkyun apretando los dientes. Suspiro fuertemente para calmar su corazón. Era inútil. Se estaba rompiendo en pedazos. —No tienes nada de que preocuparte. Mi... mi Jooheon es inolvidable.
—Te quiero... –dijo Jooheon. Intento tirar de Changkyun hacia el, pero estaba demasiado débil. El corazón de Changkyun se rompió un poco más al verlo esforzándose asi. Se inclinó hacia el, apoyando las manos cerca de la cabeza de Jooheon.
—Te quiero –dijo de nuevo Jooheon en voz más baja, rozando con sus labios los de Changkyun. —Jooheon ama a Changkyunnie.
Te amo.
En años posteriores, Changkyun se odiaria por no haberlo dicho en voz alta para que Jooheon pudiese escucharlo.
Con un suave beso, Jooheon dejó escapar su último aliento. El sonido era inquietante y anunciaba el fin, pero eso no impidió a Changkyun llamar su nombre una y otra vez, con esperanza de ver una ligera reacción.
La realidad lo abofeteo con fuerza, cuando Jooheon no se movió.
Se acabó.
Se había ido.
Nunca más vería su sonrisa.
Nunca más vería el pequeño tic nervioso que había llegado a adorar.
Nunca más vería esos hoyuelos que se formaban en sus mejillas cada vez que le sonreía.
Nunca más se despertaria entre sus brazos.
Nunca más besaria sus labios.
Nunca más... amaría a alguien como había amado a Jooheon.
Primero un sonido ahogado brotó de sus labios, luego sollozo sobre el pecho inmóvil de Jooheon, clavando las uñas en su camisa. Jooheon permanecía bajo su cuerpo, tan frío cómo una piedra.
No había rastro del feliz, asombroso y perfecto humano que Changkyun amaba. Que siempre amaría.
No había brazos que lo envolviesen mientras lloraba. No había ningún susurro de "Changkyunnie, deja de gotear" en la curva de su oreja.
Nada.
Changkyun lloró como si fuese el último hombre sobre la tierra y nada pudiera salvarlo de la soledad.
Al día siguiente Changkyun observó como el camión de "The Boyfriend Store" se alejaba de su edificio de apartamentos.
No había dejado de llorar y tener a Jooheon en su cama empeoraba las cosas. Se encontraba tan perdido en sus emociones que no se percató de que Kihyun estaba de pie, a su lado.
—¿Está...?
—Se ha ido... –susurro Changkyun sin perder de vista la dirección por la que el camión se había ido.
—Changkyun, yo...
Changkyun sacudió la cabeza y se alejó de el, entrando de nuevo a su apartamento. Esperaba que Kihyun comprendiese que nonestaba listo para hablar de ello todavía. No creía que fuera capaz jamás de explicar con palabras lo que había significado Jooheon en su vida.
Jooheon era su sol, su helado de cereza, su amigo, su novio... El amor de su vida.
No existían palabras en ningún idioma humano que le permitiese comenzar siquiera a describir lo que ellos habían compartido. De nuevo en su apartamento, Changkyun encontró una nota escondida bajo su almohada.
La leyó, a pesar de que su sensatez le decía lo contrario.
Changkyunnie. Me iré pronto. Recuerda que te quiero, ¿de acuerdo? ¡Jooheon ama a Changkyunnie! Te amo tanto como alguien como yo pueda amar. Te amo y gracias por enseñarme este sentimiento. Por fin se que es amar y ser amado. ¡Es de verdad el sentimiento más grande del mundo! No gotees, ¿de acuerdo? Nada de gotear. Cuidate mucho y no seas tan duro con Yoo Kihyun. El se preocupa mucho por ti. Adiós, mi Changkyunnie. Mi novio.
Fin.
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ABSOLUTE JOOHEON ⁛JOOKYUN⁛
FanfictionJooheon no es un robot perfecto, pero a Changkyun no le importa porque el es cualquier cosa menos un humano perfecto. Segunda historia, paralela de "Be Human"