Sabrina© (Completa)

Capitulo 12

Antes de leer quiero decirles que he estado editando mis capítulos anteriores por falta de ortografía.
Si quieren leerlos de nuevo es decisión suya y ahora si disfruten este capítulo.🌙

Joe me explica cada detalle de la pequeña venganza, pero en realidad es algo infantil lo que escribió.

—No se te hace que tus "venganzas" son algo infantiles.

—Al menos que tu tengas algunas.

—Mejor hay que dejarlo así.

—¿No quieres ver la cara de ellos cuando se las hagamos?— es inevitable no reír al imaginarme las caras de ellos.

—Okay esta bien, pero era ¿necesario venir hasta acá solo para contarme la venganza?.

—Si y también por que quería preguntarte el ¿Por que te fuiste esta tarde cuando llego, Lila?.

—No quería incomodar.

—¿Incomodar?.

—Pues que ustedes se estén besando y se sientan incómodos con mi presencia.

—Claro que no tonta— dice rodando los ojos.

—¿Cuando empezamos a preparar lo de Nina y Adrien?— cambio de tema antes de que todo se ponga incomodo.

—En el día de mañana con Nina y el otro con Adrien— veo como camina hacia mi calendario y subraya el día que será mi pequeña venganza.

—Y que tengo que hacer yo.

—Seguir a Nina y saber que es lo que le preocupa, por ahí escuché que ira a comprar una prueba de embarazo.

—¿Quien te dijo eso?— no puedo evitar reír al pensar  que la este siguiendo.

—Lila tiene una amiga de departamento que es nueva amiga de Nina.

—Esto será divertido.

Después de que se fue Joe, cayó la noche.

Voy a la cocina y veo que no hay nadie en mi casa, es muy seguro que se hayan ido a cenar con sus amigos. Agarro una manzana mientras me siento en el sofá a ver algún programa en el televisor.

—¿Que haces?— pregunta Drake sentandose a un lado mío.

—Miro una película.

—Quiero un consejo — lo dice tan rápido que es imposible entenderle.

—¿Que dijiste?.

—Quiero un consejo tuyo— escuche bien o dijo ¿quiero un conejo tuyo?, pero yo ni conejos tengo.

—Consejo de que.

—Es que creo que me he enamorado — eso si que no me lo esperaba, enamorado mi hermano no lo puedo creer.

—Dime que no es de Vanessa.

—¡No!, es Anna.

—¡La vecina!— recuerdo que de pequeña todos los dias jugaba con ella— ¿Como fue todo?.