Half a heart (Zayn Malik fanfic)

Capítulo 6

Ya nos encontrábamos todos en el aeropuerto apunto de embarcar, mientras yo hablaba con Lea por whatsapp y me decía que estaba coladita por el chico de los ojos azules, que por cierto se llamaba James, ella me hablaba de él y yo le decía las ganas que tenía de ir al concierto, que iba a ser una experiencia inolvidable, según me había enterado, vendrían el mes que viene, sólo quedaba un mes, un maldito mes para verles. Decidí dejar el móvil y decirle adiós a Lea para embarcar y subir al avión, el Lunes volvería, ahora sólo me quedaba pasar un fin de semana familiar en Francia en vez de estar haciendo cola para conseguir las mejores entradas para el concierto, pero bueno, al menos, me gustaba ir a Francia, era precioso ir allí, además tenía oportunidad de mejorar mi Francés, ya que la familia que tengo allí hablaba practicamente siempre en francés.

Pasó el fin de semana, entre fotos familiares, entre los 'como has crecido'  y entre los 'cuanto tiempo' sin verte' ...

Ya estábamos de vuelta a casa y yo me encontraba ansiosa por llegar, no podía esperar a hablar con Lea y preguntarle que entradas había cojido, cruzaba los dedos para que me dijera en pista A, y así poder hacer cola y ponernos en primera fila, pero bueno, tampoco me quería ilusionar mucho, no era buena idea, por si acaso.

En el avión me pasé todo el viaje escuchando música, incluso en algunos momentos me quedaba dormida. Nada más llegar a casa dejé todas las maletas, y, de repente, me dí cuenta de que mi móvil estaba sonando, era Lea.

(Conversación telefónica)

-Hola Ally, ¿Qué tal el viaje?, verás yo...

-Holaa Leaa! Pues muy bien la verdad, lo típico, todo muy familiar –La interrumpí– ¿Qué tal lo del tema de las entradas? –Dije con tono de entusiasmo total.

-Sí, sobre eso, esto, bueno, Quedamos y te lo cuento, ¿Vale?

-Okay, nos vemos a las 22:30 en la plaza, un besito.

-Hasta luego, amor.

(Fin de la conversación)

Que ganas tenía de que llegarán las 22:30 de la noche, no podía esperar más, el entusiasmo se adueñaba de mi cuerpo y me hacía temblar de los nervios.

Ya era hora de cenar y mi madre había llamado a Telepizza, ya me dirás tu, un domingo por la noche, que acabas de venir de viaje, a quién le apetece cocinar. Al acabar de cenar les dije a mis padres que saldría un rato con Lea, y que no llegaría mas tarde de las 00:30, ya que mañana había clase. Salí de casa sobre las 22:25, ya que de aquí a la plaza hay como 5 minutos, más o menos, y, aparte de eso, no podía esperar más. Llegué y me encontré a Lea en un banco, sola, esperándome, y corrí a darle un abrazo bien fuerte.

-Hola Lea! Bien, espero que me digas ya lo que tu sabes, porque no aguanto más. –Dije mostrando una sonrisa de oreja a oreja–Así que venga, ya tardas hahaha.

-Ah sí, sobre eso, a ver, esque, verás...

-Va tiaa, suéltalo ya!

-No pude comprar las entradas.

Las palabras que acababa de decir mi amiga retumbaron en mí como si de una bala se tratáran, como si esto a lo que yo conocía como mundo, solo fuera un infierno eterno del que no podría salir.

-¿Qué dices? Va, no empieces con tus bromas ¿Vale?

-No es ninguna broma joder, a ver, el día de las entradas quedé con James para liarnos y esas cosas, sabes que estoy coladita por él, y la verdad és que... se me pasó la fecha, y estaba completamente empanada...

-Espera, espera, ¿Me estás diciendo que no has comprado entradas para ti, para mi hermana y para mí porque habías quedado con ese gilipollas?

No podía creer lo que me estaba pasando, y no pude hacer otra cosa que ponerme a llorar, salir de ahí corriendo y llorando, eso era lo que quería hacer en ese momento, y eso hice.

-Ally! Espera joder! no te vayas así  tía, te lo puedo explicar!

-Das puto asco! no sabía que eras así, me has jodido, y bien, buscáte a otra que te aguante. –Dije gritando entre lágrimas, mientras corría hacía mi casa.

Muy bonito, todo era muy bonito esa noche, osea, no me lo podía creer, no iba a poder verles, no iba a poder verles sólo porque la gilipollas de mi ''amiga'' se había liado con un tío al que casi ni conoce, mi vida iba de mal, en peor.