Bad boy, Bad girl

No me creo que esta mujer pueda ser mi madre, es increíble como una persona puede ser tan fría y lejana con su propia hija, sin hablar del alcohol, las drogas, el sexo...aunque ya lo he superado, he aprendido a hacer las cosas yo sola, sin depender de nadie, por lo que soy más fuerte que antes y ya he superado todo lo de mi madre, ya me da igual su vida, ya no lloro, y nadie me dice lo que debo hacer, porque siempre he tenido yo sola el control de mi vida, nadie más.

Hace una semana que paso, y hace una semana que ella está en la cárcel, ¿porque?, fácil, mató a mi perro con drogas y a mi gato lo ahogo en la basura, así que la denuncié, y tiene que cumplir una condena de 3 años de cárcel, y por supuesto yo no la estaré esperando cuando salga.

Lo he estado pensando mucho y lo he decidido, me voy del país.

Me mudaré a Sidney, en Australia, porque es de los pocos sitios en los que hay menos periodistas, se habla también inglés, y porque hay un instituto mundialmente conocido por la gran cantidad de matrículas de honor que salen de ahí, y yo siempre saco sobresalientes y notables en todo, así que es idóneo para mi.

Ya tengo 17, así que me las apañare yo sólita como llevo haciendo toda la vida.

El viaje es mañana, por lo que iré al banco y sacaré la herencia que me dejó mi padre, que no es poca, y aunque apenas lo he conocido, lo quiero más que a mi madre.

Ni los periodistas, ni mi madre sabrán que me voy.

Quiero una nueva vida, alejada de ella, alejada de las mentiras que dice la prensa con respecto a mi familia, que es obviamente culpa de mi madre, y alguna que otra travesura mía, pero que odió escuchar, se lo inventan todo, y no lo aguanto más, intentaré pasar desapercibida, y empezaré de nuevo, pero una vida mejor, alejada de todos y todo lo malo que me rodea, me espera una buena vida...o eso

espero...