¿Amor o amistad?

¡Sorpresa!

Era sábado por fin y era mi cumpleaños pero eso para mi era algo no tan importante.

Escuche que tocaron mi puerta. - ¿Puedo pasar? - me pregunto Jack desde la otra parte de la puerta. - Claro pasa. - ¡FELIZ CUMPLEAÑOS! - Entraron Jack, mama, papa y ¿Sebastián? La verdad me sorprendía que Sebastián estuviera justo a un lado de Jack sin que se estuvieran peleando, y eso si que me alegro el día. - ¡Gracias a todos ! - Pasaron por completo y me dieron un fuerte abrazó cada uno después de fueron despidiendo. - Sebastián tu te esperas - El se paró y después se dio vuelta para verme serró la puerta y avanzo hacia mi. - ¿Qué hice ahora?. - Jajaja, nada pero ¿por qué tu y mi hermano se están llevando tan bien? - Le pregunte frunciendo el ceño, porque la verdad no entendía nada de nada. - Pues... No se, el fue a mi casa hoy en la mañana y me dijo que viniera para despertarte y felicitarte por tu cumpleaños diecisiete y yo sólo le dije que si, pero si te soy sincero no se ni yo porque lo hizo - Bueno si el no sabía porque yo lo tenía que averiguar pero ahora tenía que desahogarme y hablarle sobre ayer y la plática con Jack.

- ¿Te puedo contar algo? - No sabía la verdad como se iba a tomar la plática pero debía desahogarme completamente. - Claro que si Scarlet sabes que cuentas conmigo - Se acercó a mi y se sentó a un lado de conmigo en la cama. - Bueno es que ayer platique con Jack al llegar a mi casa y... - suspire - pues me dijo que había estado así de cortante y mal conmigo porque se había convertido así, Sebastián... Jack de drogaba - y ahí empece q llorar - y se metió en muchos líos y tuvo que trabajar con ellos porque no podía pagar, y después lo atraparon y pues el mintió y se libró pero ahora es más rudo y es como el tipo que me quería violar pero no se qué hacer Sebastián me siento como si toda mi vida estuviera llena de cargas pero lo que ahora me gusta es que Jack me dijo que trataría de estar mejor contigo y pues mírate ahora estas aquí conmigo sin que se estén peleando - Sebastián no dijo nada y se lo agradecía y lo único que hizo fue darme un lindo abrazó. - No te precocidad yo estoy contigo vale todo estará bien, ahora báñate y cambiare que te tengo una sorpresita. - Sebastián te dije que no quería nada. - Si, si, aja lo que digas ahora a bañarte que hueles a zorrillo - Dijo tapando se la nariz, riendo y caminando a la salida de mi cuarto. - JA JA que graciosito ahora largo - Dije mientas salía y le aventaba un cojín. ¿Qué tramara Sebastián? Pensé un poco en mi propia pregunta y me metí a bañar, termine y me puse un vestido de color azul marino con un contó dorado y con un poco de brillos, unos zapatos dorados de piso y me deje el pelo rizado y café claro como lo tengo, me puse un poco de maquillaje y delineador en mis ojos, un poco de brillo labial rosa un poco más fuertes que mis labios y fin. Salí de mi cuarto y baje en la sala se encontraba nada más Sebastián esperándome y al parecer también se cambió porque ahora llevaba unos vaqueros, una camisa blanca y el pelo desordenado como casi siempre.

- Y bueno ¿A dónde me llevarás? - Pregunte sentándome con el en el sofá. - No te diré así que te fregaste y ahora vámonos - Se paró dándome la mano. ¿Qué me friegue? A pues el que se friegue. - Si no me dices a donde vamos no voy y el que se friega eres tu - Dije cruzando me de brazos. - Vamos Scarlet, no te puedo decir sino la sorpresa se acabará, votos ¿si? - Puso la cara de perro regañado y con cara triste, la verdad no me podía negar a el. - Esta bien vamos - Me pare y avance a la puerta. - ¡Genial! La sorpresa empieza - Abrió la puerta y salimos ¿A dónde me llevara? Quien sabe.