Lagrimas carmín

Cap 1

⚠️ADVERTENCIA: Este capítulo puede contener groserías y una escena sexual forzada entre dos hombres si no te gusta el contenido evita leer esto por favor.⚠️

———Como inicio el infierno————————————

En una sala con una espléndida y enorme ventana que accedía a un balcón solo iluminado por la luz de la brillante luna llena que esplendorosa desde el cielo daba una visita a aquel ser sentado en el balcón y teniendo como únicos acompañantes a la gran luna que lo observa desde el cielo y al frío viento de la noche que a estas alturas no hacía efecto en aquel bello ser, aquel que si tomabas el momento para apreciarlo bien descubrirías que solo portaba un pantalón holgado y una camiseta de tirantes negra, que dejaba ver a la perfección aquellos brazos que fueron siempre utilizados para crear, que ahora portaban mucho más peso del que deberían cargar, pues este cargaba en sus hombros todos los problemas que fueron ocasionados por aquellos a quienes llamaba compañeros, cargaba con el peso de ser quien era, con el peso de ser Tony Stark, de ser iron-man... de ser el nuevo líder de los vengadores, de ser el representante de estos ante la ONU, de haber sido el detonante de la guerra civil... de ser lo que era ahora... de ser un monstruo lleno de sed de sangre... de ser un vampiro... ¿como paso? Muy simple...

>Flashback<

(Narra Tony)

Han pasado casi tres meses de la guerra civil, casi tres meses de saber la maldita verdad, de saber que Steve Rogers no era más que otro ser falso en este mundo, aquel a quien tanto amaba, aquel que no dudo en mentirme, en casi matarme por su amigo, por el asesino de mis padres, quizá el soldado no tenia la culpa, pues este había sido manipulado y no fue más que un simple peón en este juego de ajedrez que llega a ser aveces la vida, ¡pero eso no quita el hecho de que el maldito de Rogers no me lo dijera! Tenía derecho a saber, eran mis padres después de todo, como sea, ahora me encontraba saliendo de una reunión, ¿porque voy a reuniones si nunca asistía? Pepper no esta, se fue lejos a tomar unas vacaciones junto a Happy, ya las merecían esos dos, llevaban mucho tiempo aguantándome, me sentí algo traicionado y abandonado pero comprendí, ellos ahora están saliendo no pueden hacerse cargo de mi... y además ya no soy un niño para que cuiden de mi.

Iba tan metido en mis pensamientos que ni siquiera me di cuenta que el estacionamiento estaba completamente solo, no había ni una sola alma rondando y en realidad eso no era un problema, era mejor podía estar tranquilo con mis pensamientos... o eso creí... gracias a mi distracción no note que alguien me acechaba en la oscuridad de aquel lugar, solo al estar apunto de abrir mi auto fue cuando me di cuenta de aquella presencia... pues me acorralo contra este.

—Vaya, vaya, ¡Pero miren a quien tenemos aquí!, el señor Stark— Dijo aquel hombre con una sonrisa que logro darme un escalofrío que recorrió mi columna vertebral, mi clara muestra para huir de ahí, pero no lo haría ¡Tony Stark no huye!... que estúpido fui-

—VAYA, no tengo ni puta idea de quien eres, y la verdad no me importa tampoco, ¿quieres dejarme? Tengo pendientes importantes que resolver y charlar con un lunático que acorrala personas de la nada no es uno de ellos— Mi sarcasmo creo que fue evidente y además de poner mi bella sonrisa, lo que lo hizo molestarse un poco... mi primer error-

—Oh... es una pena distraerlo de sus pendientes Señor Stark, pero me temo que tendrán que esperar, digo tengo cosas que discutir con usted. —Coloco su sonrisa aterradora de nuevo y está vez en verdad quería correr, pues no tenía intención de dejarme... pero no corrí, ni intente alejarlo y ahí fue cuando marque el segundo error.-

—Es una pena, pero no tengo interés— acerque mi rostro al del tipo, desafiante, tercer error Anthony, tercer error-

Algo me decía que el quinto error sería mi perdición... más aun después de que me fije en los ojos de aquel extraño... y miles de alarmas se activaron en mi... llámenlo como quieran, pero creo que esas alarmas no eran más que mi instinto de supervivencia alertándome que aquellos ojos brillantes no tenían nada bueno... pero no me moví, ignore a mi instinto y aun sigo sin creer lo estúpido que fui...