El Arte De Amar

Capítulo 9: Plan Fallido

De vuelta a la residencia tomamos el metro. Aquel día había mucho tráfico, intentamos entrar en el autobús pero estaba lleno. Esto le dió mucho coraje a Levi y para no esperar media hora para el siguiente, tomamos el metro. Yo solo me dejé guiar, sinceramente no me importaba mucho en que transporte ir.

- Levi... - lo llamé. Estaba...como decirlo...algo alterado.

- Qué - contestó inmediatamente molestado.

- Tranquilízate, por favor. No pasa nada - dije sentada en unos de los asientos del metro con el ramo de amapolas en mis manos. Levi estaba de pie, enfrente de mí con una de sus manos en la cadera y la otra pasándosela por el cabello, dándome la espalda.

- Si no fuera por la vieja esa estaríamos llegando ahora mismo a la residencia - le escuché decir.

- De todas formas no entrábamos, había una familia delante nuestra y solo entraba uno de nosotros.

- Hubiéramos estado apretados pero cabíamos... ¡Hasta que la vieja me empujó! - elevó la voz.

- Respeta a tus mayores, enano... - suspiré cerrando los ojos.

-¡Ni siquiera tú los respetas! - se giró, su pelo estaba rebelde y su entrecejo estaba fruncido. Me empecé a reír ante sus pintas.

-¿De qué te ríes?!

- Nada... - me tapé la cara con el ramo y seguí riéndome. Escuché un pesado suspiro - Anda ven, siéntate un rato - palmé el asiento al lado mía cuando me tranquilicé, invitándole a sentarse. A lo que extrañamente, obedeció. Estuvimos un rato en silencio, hasta que una duda me creuzó por mi amplia mente - Oye, Levi.

-¿Si?

- Lo que decían Farlan y Petra sobre Sasha...¿Es verdad? - Levi me miró sorprendido pero rápidamente apartó la mirada.

- No es verdad... - respondió mirando a las personas que pasaban - Mikasa... Eres una chica libre de hacer lo que quieras pero te digo esto por experiencia. Ten cuidado con esos dos... - volvió a dirigir su mirada hacia mi persona, encontrándome un triste brillo en sus ojos, aparte de que todo lo decía sumamente serio. El silencio volvió. Y miles de cuestiones empezaron a hacerse en mi mente, mientras juguetaba con mis dedos el plástico que envolvía a las flores. Supongo que si quería saber porque mencionaron eso de Sasha tendría que preguntarle yo misma,¿no? Pero espera...¿Estaba interesada en esa historia? Toda estas dudas se esfumaron al escuchar el sonido de las vías chirriar. Inmediatamente nos levantamos. Nos dimos cuenta que mucha gente entraba y salía, así que nos fue difícil entrar. Lo bueno era que lo logramos... pero estábamos muy apretujados. Fui acorralada por Levi accidentalmente, pegando mi cuerpo a las puertas.

-¿Qué pasa hoy?¿Por qué hay tanta gente? - murmuraba Levi a regañadientes. Cada vez que hablaba, me hacía cosquillas en el cuello.

- Ni idea - respondí. Empezaba a hacer calor, solo separaba nuestros cuerpos el ramo que llevaba en mis manos, pero ni eso ayudaba ya que parte de su cara se encontraba en mi cuello. Sintiendo su pesada respiración. Por encima del hombro de Levi y de otro hombre gordo que se echaba en nosotros pude ver mucho movimiento entre el gran bullicio. Había algo que se chocaba con ellas y las hacía girarse. De repente un brazo apareció entre aquel mogollón, agarrando una de las llenas barra del tren.

-¡Vamos, Armin!¡Lo hemos conseguido! - con caras sofocadas pude visualizar a Eren y a Armin agarrándose como podían a la barra.

- Mira, Levi. Ahí están los chicos - lo miré pero... él a mí no, estaba entretenido mirando otras cosas por debajo de mi cuello, rápidamente los colores llegaron a mi cabeza - Levi - pero aún así lo volví a llamar, esta vez furiosa.