sakura card captor (Shaoran)

La última carta y el juez

Hola!, Se que un maratón es subir en un mismo día varios capítulos, pero igual quiero darle su momento a cada capítulo para ser leído, aún así, cada 2 días para mí si es un maratón porque suelo tardar en publicar (perdonen por eso), sin más espero que les guste

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Pero si es.. -empezó a decir el muñeco, mientras veíamos asombrados como pilares de tierra salían por todos lados amenazando con aplastar las cosas- Es la carta de la tierra
¿Están bien? -preguntó Tsukishiro corriendo hacia nosotros, antes que cualquiera pudiese responder un pilar surgió en medio de todos tirando a Daidouji y Tsukishiro de un lado y a Kinomoto y a mí del otro, por suerte Tsukishiro agarró a Daidouji quien se aferraba a él- ¿¡No les pasó nada grave!? -nos preguntó
Nos encontramos bien Yukito -le contestó Kinomoto, por mi parte mi cabeza me daba vueltas pero no lo suficiente como para dejarme fuera, la tierra siguió moviéndose alzando pilares por doquier- Profesora Misuki -llamó de pronto recordando que se encontraba con nosotros, sin embargo al voltear a ver a su dirección pudimos observar que el suelo a su alrededor estaba intacto, demostrando una vez más el gran poder que poseía,  finalmente nos pudimos parar- Pero... ¿porqué? -interrogó Kinomoto muy contrariada
Está... ¡usando magia! -le expliqué
Pero... ¿porqué en este lugar? -no supe si se refería a la maestra o a la carta, cuyo poder iba destruyendo la ciudad cada vez más
¡Sakura usa tu llave! -le gritó el muñeco saliendo de la mochila
¡Pero!... Yukito.. Aquí -pese a todo le preocupaba que él lo supiese, podía entenderla
¡Usa la carta sueño! -le dije, ella asintió y tras invocar su báculo la activo dejando, no sólo a Tsukishiro sino a toda Tomoeda, justo antes de ser casi golpeados por un pilar de tierra
¡¿Cómo detendremos este terremoto?! -gritó Kinomoto para hacerse oír
¡Sella la carta de la tierra cuanto antes! -dijo el muñeco
Tengo que hacer algo, yo prometí reunir todas las cartas Clow, tengo que descubrir una solución -dijo pensativa, su mirada cambió a una de determinación y me volteó a ver- Observaré la situación desde arriba, por favor Li, cuida de los demás -asentí con seguridad
De acuerdo -respondí, en ese momento ni yo sabía cómo detenerlo pero si sabía que para ella eran tan importantes sus amigos y familiar que quería proteger, tanto como detener la carta
Muchas Gracias -me sonrío, activó su báculo e invocó a la carta "Fly"- Ahorita regreso
Cu..cui.. -¿porqué me costaba decirle? me preocupaba por ella como por cualquier persona- Cuídate mucho -ella asintió y con una sonrisa se elevó, no pude hacer nada más que observarle alejándose, deseando que no le pase nada y preocupado por cómo podrá detener a la carta; vi que la profesora se acercó a Daidouji y a Tsukishiro y decidí hacer lo mismo- Daidouji, ¿están bien? -pregunté al llegar con ellos, estaría a su lado por cualquier cosa, Kinomoto me pidió cuidarlos y eso es lo que haría.
Si Li, pero el joven Yukito quedó inconsciente  -dijo preocupada- espero esté bien pero la que me preocupa es Sakura, se que estará bien y es muy fuerte pero aún así...
Descuida -dije posando una mano en su hombro- estoy seguro de que ella puede con esto -me miró y tras un momento sonrío asintiendo, la tierra tembló una vez más- Deberíamos mover a Tsukishiro, sólo está dormido por el poder de la carta Sleep pero en medio del camino podría lastimarse si aparece un pilar de nuevo -ella asintió. 

La profesora se acercó más y entre los tres lo llevamos a un banco donde con trabajo lo recostamos, la profesora se mantuvo cerca y supe que Tsukishiro estaría protegido; volteé a ver a Daidouji y estaba grabando a Kinomoto, una gota salió de mi cabeza, de verdad que no perdía oportunidad para grabarla. La carta la estaba persiguiendo y ni la carta agua ni el fuego de Kerberos pudieron detenerla, estaba pensando en intervenir cuando vi que dejó de saltar y se enfrentó una vez más a la carta, apareció su sello mágico en el cielo y la carta Wood empezó a atrapar a la carta de la Tierra, la bestia de tierra desapareció y con ella los terremotos,  supe entonces que había logrado sellarla.