En el mundo de Jimin no todo era oscuro aunque no todo era colorido.
Su vida siempre fue difícil y cuando decía eso no se refería a difícil físicamente sino mentalmente, el no sufría por cosas como trabajar para alimentarse y sobrevivir un día más, el sufría por aguantar la fatiga emocional y no explotar antes de que el día terminará... Y el a decir verdad no sabía que era peor.
— Otro día más, otro día menos — suspiro mientras miraba su reflejo en el gigantesco espejo en frente de el, su apariencia no le molestaba pero si alguien le llegará preguntando sobre su tipo ideal no sería alguien como el, de grandes mejillas, ojos rasgados y pequeños junto a esa boca que le parecía tan grande y molesta.
Tomo sus pocas cosas y salio de la habitación no sin antes mirar la hora, no era tarde pero aun así que se dio la prisa de salir del departamento.
Era un departamento sencillo, dos cuartos, un baño, una sala y una cocina que poco usaba, este lugar su propio espacio personal.
Jimin había descubierto ese lugar después de estar implicado en una pelea con un chico de la cual ya ni siquiera recordaba el motivo, lo que si recordaba era lo golpeado y afectado emocionalmente que termino después de esta, ese día camino sin rumbo y dinero hasta que termino agotado del cansancio y termino por sentarse en una banca frente a un pequeño y pintoresco edificio. Después de unos minutos una señora que lo había visto desde el momento que llego ahí tan indefenso y golpeado que se negaba dejarlo ir sin antes atender sus heridas a lo que Jimin solo contestaba un "No no, no se preocupe estoy bien" "No hace falta que se moleste" y ella contestaba un "Como voy a dejar en ese estado aun muchacho tan guapo" entre otras cosas mas que impidieron que siguiera rechazando la ayuda de esa dulce señora.
Después de un rato de platicas Jimin descubrió que la señora era dueña del edificio, esa vez lo ayudo y le dijo que podía volver cuando quisiera ya que le recordaba al hijo que no veía desde hace ya mucho tiempo para después decirle "Aunque no tienen nada de parecido, solo la altura y la habilidad de meterse en problemas".
Desde ese momento Jimin volvía a ese lindo edificio para pasar el tiempo en sus ratos de crudeza y agobio en la compañía de su nueva amiga... a el le gustaba platicar con la señora Min tanto como a ella con el, además de que a este le parecía extraño, la mayor parte del tiempo se encontrara sola... según lo que ella le había platicado estaba casada desde hace mucho tiempo hasta que su esposo murió y se convirtió en una viuda, la única familia que le quedaba era su hijo que después de superar su momento de duelo decidió que quería estudiar en una universidad fuera del país para cumplir sus sueños, Jimin recordaba la frase que uso esa vez "Lo mejor que pude hacer por el era apoyarlo... de modo que así su felicidad seria la mía" .
Así fue pasando el tiempo prácticamente desde que entró a la preparatoria hasta que hablo con la señora Min para que le rentara un departamento, lo que ella accedió con gusto.
Recorrió con la mirada el lugar, tantas cosas habían pasado dentro de esas paredes color celeste.
Ese lugar era su espacio...
Era su refugio...
Y tal vez no lo volvería a ver durante mucho tiempo... eso era lo que creía el rubio, ciertamente su padre no sabia que el lugar a donde el rubio solía desaparecer era ese lindo departamento, lo que si sabia era lo mas relevante, que Jimin solía escapar y hacer cosas de las que el no estaba enterado y justamente eso era lo que mas le molestaba.
Días atrás había hablado con el rubio sobre su actitud "Un hijo mío no puede ir por la vida haciendo todas las aberraciones que sea que los adolescentes hagan, no me gusta que te desaparezcas de repente... si tu actitud no cambia pondré un guarda espaldas para que te vigile y acompañe en todo momento" eso había sido la gota que derramo el baso para el.
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GiveMe
Teen Fiction¿Nunca se han preguntado en el destino? Siempre supe que los lazos de sangre en mi estaban malditos, que fuera lo que fuera yo no estaría preparado para enfrentarlo y que ser débil era parte de mi. No lo supe de inmediato pero cuando ese pelinegro...