-Despertar-

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Narra Alba:
No me lo podía creer, Nat había despertado, mi cuerpo estaba en shock, no sabía como reaccionar, lo primero que hice fue pulsar el botón que había al lado de la cama para que pudieran atenderla.

-Nat tranquila, estoy aquí - dije mientras la abrazaba con delicadeza para no causarle daño.
Ella me devolvió el abrazo torpemente como pudo, y empece a notar húmeda mi camiseta, la suya también lo estaba, las dos estábamos llorando- shh tranquila, estoy contigo.

-Porfavor puede apartarse- me pidió amablemente un doctor que venía a atender a natalia, yo hice lo que me pidió y dos doctores más entraron a atenderla mientras me pedían que saliera de la sala, yo sin quererlo, lo hice, quería quedarme con ella, pero no era el momento.
Al salir de la sala, me senté en una silla fuera, y cogí el teléfono y marqué el número de maria.

-Mari- dije con un hilo de voz alegre.

-que pasa rubia? -dijo maria preocupada.

-Nat, Nat a despertado- dije con la misma ilusión que tienen los niños al abrir un regalo en navidades.

-Voy para allá- tras decir esto colgó.

Entonces toco el turno de llamar a su familia.

-Hola? -me dijo una voz varonil.

-Hola señor Lacunza, soy alba- dije emocionada.

-A si alba, que ocurre? -me dijo el padre de natalia.

-Natalia ha despertado- tras decir esto, solo pude oír las lágrimas que le caían y su respiración.

-Dios en.. enserio? - dijo como pudo entre sollozos.

-Si enserio, justo hace unos minutos, la están atendiendo- dije alegre.

-Muchas gracias alba - dijo un poco más calmado.

-Nada, bueno hasta luego- dije yo.

-Por todo- dijo antes de colgar.

Por ultimo llame a mi madre, maria ya se habría encargado de llamar a todos los amigos de Natalia y su padre a sus hermanos y a su madre.

-Mami? - dije alegre.

-Si Cariño, que quieres? - dijo sorprendida.

-Mama, natalia ha despertado- dije ahora si rompiéndome a llorar de alegria.

-Que bien alba, me alegro mucho- dijo alegre.

-Pero una cosa mamá, no vengas porfa, prefiero que la conozcas cuando ella esté preparada- dije limpiadome las lagrimas.

-Claro cariño, tomaros el tiempo que queráis.

-Gracias mamá, te quiero -le dije muy sincera.

-Y yo hija- dijo colgando el teléfono.

Me tumbe en la silla, y mire para el techo, mientras pensaba lo feliz que me sentía, al fin la mujer que más quiero, se había despertado, al fin podía estar con ella, al fin podría contarle todo lo que hacía durante el día, al fin podría desahogarme con alguien, al fin podría cantarle mi canción y al fin podría demostrarle lo mucho que la quería, mi amor.

Maria llegó unos minutos después, acompañada de África y marta, las tres se llevaban muy bien. Y más tarde llegaron los padres y hermanos de natalia.

-Familiares de Natalia Lacunza- dijo un doctor, saliendo de la habitación de la morena.

-Si? - dijeron sus padres y hermanos a la vez.

-Natalia está estable, pero, no habla con fluidez, es torpe con sus movimientos, ha olvidado caminar, y algunas cosas más, todas son consecuencia del coma, y todas se pueden arreglar con un poco de paciencia, esfuerzo y dedicación- dijo el doctor- podéis pasar a verla.

-Muchas gracias- dijo el padre de natalia mientras entraban a verla, yo me quede afuera con Mari, afri y marta. La verdad es que estaba más triste después de todo lo que dijo el doctor ya que se que se recuperaría, pero también se que ella se frustraría y no quería verla mal, no otra vez. Nunca más.

Los padres salieron después de una hora y me dieron paso, me levanté de la silla, y me dirigí a la habitación, abrí la puerta y allí la vi, tumbada y sonriendo tristemente.

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Se viene recuentro JAJAJA, que ganas, que pasara? :)

No me dejes | ALBALIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora