Capítulo Primero: "La Dulce Agonía"

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Las calles eran frías y oscuras, toda la ciudad estaba hecha pedazos y el sol temía ponerse en lo alto.

Nadie podía con ella.

Su traje negro se adhería a su figura, su antifaz protegía su identidad, y el negro de sus labios se curvaba en una sínica sonrisa.

Se había elevado un gran trono, desde donde ella podía disfrutar de la miseria en la que estaba sumergida toda aquella gente, que aún mantenía la esperanza de que algo cambiara.

-Chat Noir- llamo con voz agridulce.

Este apareció tras ella.

- ¿Has pensado en algo?

El negó.

- ¿Te sientes en desventaja sin tu amada Ladybug?

El joven prefirió no responder.

-Nunca fuiste nada sin mí. No puedes vencerme, ¿Cómo lo harías? No puedes ni purificar un akuma. Te enamoraste de una faceta y olvidaste la otra, no me quieras por quien soy, si no, por quien tu creías que era.

-Sabes que no es así.

-Hay por favor, todos idealizaban a Ladybug, pero no se fijaban en la joven que venía tras ella.

-Siguen sin conocerte, no saben quién eres y como te amaron, hoy te odian.

-Pero ya nadie busca a Marinette.

Nuevamente, guardo silencio. Tenía razón, sus amigos no la buscaban, y sus padres dejaron de hacerlo.

-Los maleantes están arrasando con todo, cada día aumentan los robos y las muertes, ¿Es eso lo que quieres?

-Quiero verte en acción gatito, ¿Por qué no le evitas?

-Sabes que no tengo la fuerza suficiente. Me sorprende que no hayas capturado a Plagg.

-La gente te ve a mi lado, sin hacer nada, ven que no puedes conmigo, y la esperanza en ti disminuye, ya te empezaran a mirar como lo hacen conmigo. Sin embargo, anoche he mandado a capturar al maestro fu. Esta encerrado con tu padre, todos los Miraculous están bajo mi poder, excepto el tuyo.

La miro, seguía siendo hermosa, sus mejillas sonrosadas y sus ojos risueños, todavía había esperanza.

- ¿Mi padre sigue transformado?

-Sí, pero no puede hacer nada desde donde está. Soy más poderosa que él, es imposible que me quite el akuma.

El chico se acercó a ella y se sentó a sus pies. La miro intentando descifrarla, no sabía cuál sería su siguiente paso, pero sabía que no sería bueno.

- ¿Pasaras toda tu vida mirando todo de aquí arriba?

-No lo sé.

-No te entiendo.

-No tienes porque, te pido que me sirvas, no que me entiendas.

-Pero algún día alguien te vencerá.

Ella lanzo una carcajada que resonó entre las paredes.

- ¿Aun crees que podrían?

-No pierdo la esperanza.

-Esperanza...

-De que vuelvas.

-No lo hare.

- ¿Cómo lo sabes?

-Amo el poder.


-Pero el poder te destruye.

-No lo hará.

-Sí, ya lo hizo.

Lo miro con desdén.

-Si tanto amas a Paris, ¿Por qué no haces algo?

-Sabes que no puedo contra ti, no lucharía contigo.

-Tienes miedo.

-Amor, más que miedo. Aunque mi amor sea suficiente, y haría lo que fuera por que vuelvas en sí, ambos sabemos bien que solo no puedo. No cuando nos complementamos.

Se escucharon gritos provenientes del interior de una casa. Él se puso en alerta.

-Ve, están intentando robar en una casa.

El chico se trepo y fue de techo en techo hasta llegar a la propiedad. Hacia todo lo que podía, pero no era suficiente, ella lo miraba colapsar, y llegar cada vez más débil.

Dulce Agonía  [009val-JAZVAL]Where stories live. Discover now