No prestaba atención a nada de lo que sucedia a su alrededor y tenia la mirada clavada en sus pálidas manos
Llevaba así desde principios de verano pero nadie hacia nada para que mejorase y se limitaban a mirarle con repulsión hasta el día de su regreso a Hogwarts,el único lugar donde podía ser medianamente libre
Había visto antes a esa chica:sabía que era de Ravenclaw e iba a su curso pero desconocía su nombre.Si la situación hubiera sido diferente quizá hubiera intentado ligar con ella pero no se sentía con fuerzas como para hacerlo.
Quería disculparse por haberse portado así pero eso no era lo que le habían enseñado sus padres de modo que lo único que podía hacer era averiguar su nombre y observarla de lejos.
***
Draco se encontraba solo en el andén con su baúl para montar en el tren porque había decidido no dejar que su padre le acompañara ni que ninguno de sus supuestos amigos le hablaran ¿acaso no entendían que la situación no era un juego de niños?
Paso todo el trayecto solo en un vagón y caminó sin más compañía que su equipaje hacia el castillo que prácticamente le había visto crecer,se sentó en la mesa de su casa mientras observaba la notable falta de alumnos y buscó en la mesa de los Ravenclaw a la chica morena pero no la ubicó.
Comió en silencio bajo las miradas reprobatorias de los otros adolescentes y se llevó la mano inconsciente a la marca tenebrosa,la cual le ardía,cuando notó la presencia del profesor Snape y este esbozó una diminuta sonrisa de apoyo.
Luego se levantó en medio de todo el silencio en dirección a la habitación pero se detuvo en cuanto observó como los ojos marrones de la Ravenclaw cuyo nombre desconocía se habían posado en los suyos.Ella estaba rodeada de gente y aparentemente feliz hasta que se fijó en la mala apariencia del rubio y se levantó inmediatamente sin ser consciente de que allí había más gente.
Draco la miró sin expresión y ella se fue en dirección al pasillo sin decir palabra pues ya tenía suficiente con los murmullos que había dejado tras ella y el Slytherin trazó el camino que la morena había hecho previamente.La encontró apoyada en el frio muro,esperando.
-¿sabías que vendría?
-Era una corazonada pero no estaba del todo segura ,es decir, una no se imagina que un Slytherin la siga y mucho menos si es el rey de las serpientes - rió por lo bajo mientras se apretaba la coleta que llevaba puesta - Draco Malfoy ¿no?
Si mal no recuerdo no tuve tiempo para presentarme cuando me echaste del baño de chicas,de cualquier forma me llamo Gia,aunque dudo que te interese -clavó su profunda mirada en Draco y este se impresionó
-Te lo habría preguntado si no me hubieras interrumpido de esa forma - el rubio se puso tenso
-Malfoy,solo quería ayudar y ahora quería saber si estabas bien.No te iba a pedir perdón porque creo que yo hice las cosas bien -la chica comenzó a molestarse por la actitud de Draco
-¿Crees que yo te iba a pedir perdón?¿a tí? -rió maliciosamente- ¡Yo no me disculpo con nadie!¡deberías haber sido tú la que lo hiciera!
-¿Yo? Creo que eres un poco egocéntrico ¡Solo pretendía ser amable!
-¡Parecía que querías disculparte!¿para que querías verme?¿acaso te gusto? - preguntó con sorna y ella se ruborizó- sé que soy excesivamente irresistible pero no es necesario que me acoses- sonrió burlonamente por primera vez en meses y eso indignó un poco más a Gia
-¡Por las barbas de Merlín! ¡Quería saber si estabas bien y quería que nos hiciésemos amigos,pedazo de narcisista!- ambos se desafiaron con la mirada y tras unos segundos de tensión rieron juntos
-¿Estás segura de que no eres una Slytherin? - Gia asintió convencida - estarías muy bien en nuestra casa... bueno yo me tengo que ir pero te tenía que decir una cosa
-Adelante
-Me voy ahora pero si quieres nos podemos ver a las 11 en la puerta del Gran Comedor para que te lo diga - Draco se empezó a alejar dejando sorprendida a Gia
-¿Por qué no me lo dices ahora? ¡No me puedes dejar con la intriga tanto tiempo!
-Sé paciente -se giró una última vez para giñarle el ojo y dejarla aún más desconcertada
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Ayuda [COMPLETA]
FanfictionUn alma destrozada y una que es capaz de herirse a si misma por hacer que él no se sienta tan mal Cientos de pesadillas que desaparecieron durante meses pero con dos palabras reaparecieron Dos caminos que se juntaron y terminaron formando uno solo...