El chico de los lentes hipster.

Capitulo 1.

Iba en el auto con mamá camino a mi nuevo instituto, tan solo es este año- "aguanta solo un poco, solo queda este año y ya, podras hacer lo que quieras."- me decía a mi misma mientras observaba por la ventana del auto nuestra nueva localidad, realmente era lindo, aunque habia mucho transito y esas cosas era un lugar muy acogible, viviamos en Santa Monica a solo unos treinta minutos de Los Angeles, esto era lo que queria, vivir en un lugar con playas, parques, un lugar donde nunca me aburriera, pero lamentablemente estaba el instituto. Mamá estaciono en la entrada y giro hacia mi.

-Se que esto es algo dificil para ti, por el hecho de haber dejado todo en Boston, pero ve el lado bueno a todo esto hija, quiero y deseo lo mejor para ti.- Indico mi madre con una hermosa sonrisa.

-Lo sé y lo entiendo mamá, no te preocupes, estaba, estoy y estare de acuerdo con la desición que tome.-Respondi sonriendole, pero sin que mi sonrisa llegara a mis ojos.

-Ten un grandioso día, paso por ti a la una y treinta, ¿está bien?.

-Si mamá, acá te esperare.-Indique besando su mejilla para luego bajarme del auto.

Todo era acojedor y sabia que acá seria igual que en mi anterior instituto, estaban las "putas", "freakys", "nerds, "populares", "marginados", todo un zoologico -"será un largo día"- pensé para mis adentros, puse mis audifonos, saque mi ipod y de inmediato sono "safe and sound" de Capital Cities.

Me dirigi a la dirección en busca de mi horario y mi casillero, en el recorrido recibí demasiadas miradas, las cuales ignoré, siempre fui una persona que se apreciara a si misma y me prometi que nunca dejaria que nadie me pisoteara nunca más, por lo cual decidi un cambio rotundo,adelgace mucho más que antes,corté mi cabello negro hasta más abajo de mis hombros, no tenía que usar mis lentes así que enseñaba mis ojos verdes, cambie mi forma de vestir, de vestidos a shorts o jeans rasgados, de sandalias, tacones a tenis, un cambio inmenso que me gusto demasiado.

Segui mi camino pero solo unos pocos pasos ya que escuche algo similir con "piensa rapido nerd" y luego algo golpeo mi cabeza, caí de inmediato al suelo.-Joder, lo siento demasiado, te encuentras bien?-abri mis ojos para encontrarme con un chico con lentes y debajo de ellos unos hermosos ojos color cafe.-Lo siento, iba para mi, trate de esquibarlo no sabia que estabas detras mio.-Masqullo con timidez, lo cual me parecio tierno.

-Estoy bien, no te preocupes, ¿Esa botella de coca-cola iba para ti?-Pregunte con curiosidad, lo más probable es que si, el chico lucia como un tipo de nerd por sus lentes, los cuales hacian verlo demasiado atractivo.

-S-si, es el primer día de clase, siempre escogen a alguien para fastidiarlo por un día o por todo un año... ¿Eres nueva?... nunca te habia visto...-Susurra esto ultimo tan bajo que apenas le escucho.

-Si, soy nueva, soy Clare y tu eres...- Deje lo ultimo al aire para que el respondiera.

-Thomas, un placer...-Contestó con una sonrisa timida,-¡Deberia de ser prohibido que chicos así sonrian! ¿No saben que pueden alborotar hormonas?- Indico una voz en micabeza- Y tu quien eres?- Pregunté ¿Porque carajos alguien me estaba hablando en mi mente?- Soy tu conciencia idiota.- Oh claro, espera hace cuanto estas ahí?- ¿Eres idiota o qué? ¡Estoy aquí desde que naciste!- ¡Oh vamos tu no me vas a...-Pare de discutir con esa vosecita de mi mente, Thomas me miraba raro y con algo de diversión-¡Bravo creera que soy una loca!- ¿Hasta Ahora te das cuenta?- ¡Oh vamos callate lo vamos a espantar!

- Lo siento Thomas.. Sabes donde se encuentra la dirección?- Cuestioné.

-Si claro, ven te acompaño.-Indicó Thomas.

Nos dirigimos los dos, estaba cerca, pero gracias a esa lata de coca-cola no pude llegar a mi destino. Thomas saludó a la secretaria y le indico que era nueva minutos después entre a la oficina encontrandome con una mujer algo joven.-¿Debes de ser Clare Adams, no?-

-Si, un placer directora...-Leí su nombre en una pequeña placa sobre su escritorio.- Smith, venia por mi horario y la llave de mi casillero.

-Oh claro, toma querida, este sera tu horario de ahora en adelante, espero no tener problemas contigo, veo que eres una chica muy atenta y con buena compañia- indicó observando a Thomas que se encontraba fuera de la oficina sentado en un silla observando el suelo.

Le sonrei de forma amable.-Tengalo por seguro Señorita Smith, no tendra ninguna queja por parte mia, ¿puedo retirarme?-Pregunté amablemente.

-Oh claro y bienvenida al John Adams Middle School.-Sonrió con dulzura, la cual respondí.

Sali de alli y me encontré con la mirada de Thomas. Le dedique una sonrisa la cual respondió algo timido.

-Cual es tu primer hora?- cuestionó aún observandome.

-Historia.

-Yo igual, vamos, llevamos unos minutos de retraso.- Indicó me jaló de mi mochila y salimos corriendo como si fuera el fin del mundo.

Thomas dio dos golpes a lo que se suponia que era el aula de Historia, segundos despues salió lo que se suponia que era el profesor, era un hombre de aproximadamente treinta y tres años talvez? Alto, cabello oscuro y mirada intimidante.-Retraso.-Indico señalando un reloj que se encontraba en su muñeca.

Thomas inhaló y dijo.-Profesor Harris ella es nueva, estuvimos en dirección co la directora Smith.-Indicó algo agitado por haber estado corriendo minutos antes.

-Que sea la primera y la ultima pasen.-Indicó haciendose a un lado de la puerta, cuando pasamos todos voltearon a vernos, en especial a mi por ser la nueva.

-Bien, clase ella es...

-Clare, Clare Adams.-Respondí sonriendo hacia la clase.

-Y es su nueva compañera, porfavor busca y ubicate en un puesto.-Indico el profesor Harris.

Dirigí mi vista a todos los puestos y me encontré con los ojos de Thomas el cual sonrio timido e hizo señas con sus ojos hacia su lado, sonrei y me dirigí hacia mi puesto, llevandome unas cuantas miradas.

La unica clase lenta fue historia, el resto fueron horas libres ya que era el primer día así que tuvimos que presentarnos y cosas así, pasé todo el día con Thomas, con el cual tenia todas las clases con el, a excepción de Gimnasia ya que separaban a los hombres de las mujeres, nosotras voleyball y ellos Lacrosse, pero no hicimos nada ya que el entrenador Samuels llegó con resaca, por lo cual los hombres molestaron con el, mientras que Thomas y yo nos sentamos en las gradas.