El chico de los lentes hipster.

Capítulo 7.

-Soy un Ángel, Clare.- Dijo mirandome fijamente a los ojos.

Creo que me desmaye, lo juro, estaba en shock, es que, osea, duh, eh... ¡ESTO ES IRREAL! ¡No puede ser verdad! un Angel... ¡Un Angel! Esto no es normal... debe ser un sueño... podría ser... "Hey, entiendelo, debe ser dificil decir algo tan serio a alguien tan idiota, hueca, sin cerebro como tú, compadezco al chico, enserio." "Callate idiota, se supone que debes de estar de mi lado, esto no es normal, no lo es." "Sé que no lo es, pero trata de entenderme, tuve que alejarme de ti por muchas razones y realmente lo siento, pero si te cuento esto es por que confió en ti, Clare." "Pero es que..."  Lo observé a lo ojos, realmente no sabia que hacer, como actuar, que decir, así que hice lo que mi corazón decia, lo abraze como nunc alo habia echo, dandole a entender que lo apoyaria apesar de todo, de que esto no fuera nada, nada normal, y lo besé, anhelaba sus besos más que nada, se sorprendio un poco, pero segundos despues me siguio el beso, era lo que más queria, estar con el, y ahora lo entendia, bueno no tanto, pero sí sospechaba por que se alejó de mi, luego recordé que el siempre leyó mi mente, me aleje de inmediato.

-Thomas, uh, entonces... ¿desde siempre has leído mis pensamientos?.-Cuestioné, esto era lo más incomodo del mundo, lo juro. El lo noto, asi que me abrazo y dijo.

-Si, desde que llegaste lo hagó, "¡Deberia de ser prohibido que chicos así sonrian! ¿No saben que pueden alborotar hormonas?".- Dijo con voz chillona, tratando de imitar mi voz, golpé su hombro.

-Yo no hablo así idiota.-Dije tratando de lucir seria.

-"es tan hermoso".- Dijo tratando de imitar otravez, maldito imbecil, me puse seria y colorada al saber que leyó todo eso, ¡Estoy jodida, jodida! ¡Cuida ese vocabulario Clare!  ¡No te metas Thomas, que te he dicho ah?! Me giré observandolo seriamente, el rió, me abrazo y poso su mano en mi cabeza moviendola de un lado a otro como si estuviera acariciando a un cachorrito, agachó un poco su cabeza y me besó, menuda forma de distracción ¿eh?.

Thomas se habia quedado a dormir esa noche conmigó, queria recuperar el tiempo que perdio esos días conmigo, cuando desperté se encontraba observandome tan cuidadosamente, sonreí al ver su rostro, levanté un poco mi cabeza y rocé sus labios, el sonrio en los mios.

-Buenos días hermosa.-Me apretujo más en sus brazos, me sentia tan viva, esto era lo que queria, lo supe desde un principio, pero que fuera alguien n-o-r-m-a-l pero bueno, Thomas es lo mejor que me ha podido pasar, de eso estoy segura.

-Buenos días Angel.-Sonrei al recordarlo, el sonrio aún más si es es que era posible.-Lamento explotar nuestra burbuja, pero ya te tienes que ir.-Dije haciendo pucheros, el rió, me beso y se quedo observandome.-Hey, enserio, tienes que irte.-Respondí, si mamá abriera esa puerta seria la tercera guerra mundial, me mandaria a un internado de monjas, por mucho que le cayera bien Thomas, no le gustaria encontrase con esta situacion, ¿cierto? 

-Necesito mi camisa, Clare.-Dijo con gracia, oh claro, me ruboricé al instante, recordé que la noche anterior le rogue que me dejara su camisa y así fue.

-Pero está me gusta.-Dije haciendo pucheros, el rió y se levanto de la cama, quede asombrada, este chico era la perfección, para mi, aclaro, no era ni muy alto ni muy bajo, pero yo era enana al lado de el, cabello castaño, ojos cafe, piel blanca, manos perfectas, su cuerpo, era, Dios, su torso no era de esos super musculosos de Six pack o eight pack, pero si se resaltaban era perfecto para mi, una combinacion de dulce, tierno y sexy a la vez.

-¿Disfrutando de la vista?-Dijo algo egocentrico.

-Mm nop, simplemente me gusta apreciar las cosas feas.-Dije con una sonrisa de ¡Te gané idiota!