-Disculpa, yo me bajo en la siguiente parada- lentamente abri los ojos la luz tenue del lugar hicieron que se me adaptara rápido la vista, volteé a donde provenía la voz y un chico me veia con una sutil sonrisa. Ahi cai en cuenta de donde estaba y lo que estaba haciendo, estaba en el transporte publico y me habia dormido en el hombro de un extraño, sonrojada a mas no poder me levante del asiento y le di el paso.
-lo siento, lo siento de verdad no era mi intención, bueno yo no me di cuenta a que hora, de verdad estoy muy apenada- me tape la cara con ambas manos y escuche como el chico río levemente, me toco el hombro y me dijo.
- Tranquila a todos nos pasa una vez en la vida, las noches son demasiado cortas como para descansar lo suficiente.
Lo mire con mas detenimiento, era un chico mas alto que yo tenia una chamarra negra con toques amarillos, su cabello esta cubierto por la gorra de la misma, tenia unos lentes amarillos con negro muy llamativos, de su cuello colgaban unos audifonos naranjas de diadema muy grandes, sus ojos eran de color miel y sonrisa era encantadora.
Me sonroje mas, este chico era atractivo y me habia quedado dormida en su hombro, no podia pronunciar palabra, solo me quede ahi viéndolo directamente a los ojos.
-¿estas bien? Espero que mi hombro no haya sido incómodo- dijo mientras se rascaba la nuca y se sonrojaba un poco.
-¡No!- grite - quiero decir, perdon por dormir sobre ti, quiero decir en tu hombro sin permiso, yo.. a... Gracias.
-Jajaja no hay de que, pero ten mas cuidado la próxima vez, nunca sabes con que clase de personas te puedes encontrar - me dijo mientras me giñaba el ojo, el autobús paro en ese instante - bueno fue un placer conocerle señorita.
Vi como bajaba del transporte estaba sentado justo hasta atras del bus como suelo hacerlo asi que pude ver perfectamente el salto que dio para tocar la acera.
- ¡Adios MC!- grito justo cuando el autobus reinicio su marcha, mi cerebro proceso toda la informacion rapido y corri a la puerta que ya estaba cerrada.
- seven...- me trague las ganas de gritarle pero pude ver por la ventana como se quitaba la gorra y dejaba ver sus cabellos rojos, me despidió moviendo sus manos exageradamente.
- señorita por favor tome asiento, la puerta no se abrirá hasta la siguiente parada- escuche la voz del chofer y rapidamente me volvi a sentar, todavia faltaba para llegar a mi parada asi que saque el teléfono.
[Nuevo mensaje]
Él habia escrito primero, de alguna forma esto me molesto.
707:
¿feliz? Por fin me viste en persona princesita.Tu:
¡Maldita sea seven! Eso no se vale, esta no era la forma en la que me queria encontrar contigo. ¿en donde demonios te subiste?707:
Me se todo tu horario cariño con eso fue suficiente para calcular todo tan perfectamente y hacer que te sentaras a mi lado, que te durmieras no estaba en mi plan pero fue mejor, de todos modos no pensaba hablarte hasta mi bajada :pTu:
¡Eres cruel! Yo queria hablar contigo, ir a algun lado u otra cosa T-T707:
LoL mas suerte para la proxima querida, por sierto te ves hermosa cuando duermes y hilo de baba sale de tu boca.Tu:
Callate luciel, ¡yo no babeo cuando duermo! Y tu hombro no esta comodo, creo que me torci el cuello.707:
Que crueles palabras para la persona que soporto tu peso por 1200 segundos, jaja tal vez ¿debí dejar que siguieras durmiendo y despertarte unas tres paradas despues de tu casa?Tu:
Yo no soy cruel, tu eres cruel por tenderme este tramposo e injusto encuentro y mas por que eres ¡¡malditamente atractivo!!El minuto termino, el celular se reinicio justo cuando envie el mensaje, él no era el unico que podía calcular las cosas perfectamente, mi cara estaba ardiendo por todo lo que paso en estos escasos minitos.
Queria gritar, dar saltos y vueltas por todas las emociones que tenia en mi interior, llegando a casa las dejaría salir pero por el momento solo podia cerrar fuertemente los ojos y morderme el labio.
-seven eres un tonto...
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Ya me cansé de los numerales empezaremos con mensaje 21 para mañana :v
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Diario de mensajes. [[Finalizada☆]]
FanfictionDicen que un mensaje de una persona especial puede cambiar tu ánimo, ¿pero que pasa cuando no conoces al remitente? al principio da miedo Y tratas de ignorarlo, pero todas las palabras que escribe son tan dulces que ahora esperas su mensaje diario. ...