Sandra y Lucía son dos hermanas de 13 y 14 años, gemeliers a muerte, que viven en Triana. Su vida da un giro de 360 grados cuando sus padres le dan la decepcionante noticia de que se tienen que mudar a Mairena del Aljarafe, el pueblo de sus abuelos, debido a que su abuela ha enfermado y necesita ayuda en su día a día. En Mairena del Aljarafe conocerán a personas de las que se harán inseparables, pero no todo será color de rosa, ya que pasarán por varios baches difíciles de superar.
Sandra, tiene 15 años y está estudiando 3 de ESO. Es morena, con el pelo no muy largo, mas o menos por debajo del hombro, castaño y liso, y los ojos de un color pardo, entre marrón y verde, y porta unas gafas grandes y marrones, muy bonitas. Es más bien baja, pero le gusta ser así, y delgada, pero con curvas. No es la típica chica de pelo larguísimo y ojos que enamoran, pero no le hace falta ser así, ya que es muy guapa, aunque a veces se siente a la sombra de su hermana, que es mucho mejor. Sandra tenía una personalidad que enamoraba, era simpática y extrovertida, graciosa incluso en los momentos tristes, y era una grandísima persona, sabía escuchar y razonar las cosas, y era fiel a sus amigas siempre, nunca traicionaba, pero era muy inocente, y siempre acababa siendo utilizada por algunas personas. Tenía 3 amigas; Rocío, Marta y Pilar, y las cuatro eran una piña, siempre estaban juntas.
Lucía tiene 16 años y estudia 4 de ESO. Es de estatura media, ni alta ni baja, morena, de pelo largo y castaño, y ojos grandes de un color verde claro que enamorarían a cualquiera. Es la típica niña que tiene a todos los chicos tras ella, y eso hace que la fama se le suba un poco a la cabeza, pero siempre está Sandra, su hermana, para bajarle la fama y llenarla de humildad. Aún sigue buscando su príncipe azul, y es que aunque tenga muchos pretendientes, ninguno le hace sentir esas mariposas que le hizo sentir su ex novio, Pablo, que se tuvo que mudar a Mairena del Aljarafe por motivo del traslado de trabajo de su padre. Antes, era muy simpatica y loca, pero desde que pasó lo de Pablo, es un alma en pena, nada la hace feliz, aunque tiene a su hermana que la anima siempre que puede, y a sus cinco amigos; Manu, Asun, Celia, David y Guille, y gracias a ellos siempre se sentía mejor.
