Una Luz En La Oscuridad

Capítulo VI

El vuelo de Miami a Kiev salía en una hora, la familia Grey estaba reunida comiendo algunas galletas mientras esperaban que aquella hora pasará. Jessica y Alyssa no querían que Octavia se fuese, y Octavia tampoco quería irse pero ya debía volver a Ucrania, ella estaba segura que los Dragomir quería contarle la cabeza, y por otro lado habían cosas que hacer en la universidad y el hospital.

— ¿Debes irte?. – Alyssa miró a Octavia y la castaña sólo sonrió de lado.

— Para mi desgracia. ¡Pero ustedes pueden ir! Podrían pasar las vacaciones de verano allá. – Octavia tomó las manos de su tía y su hermana dando un ligero apretón – O yo podría venir y podríamos ir con la abuela a California.

— Aún tenemos dos meses para eso. – Jessica le regaló una sonrisa a su sobrina la cual asintió – Vele el lado positivo, pasamos tres semanas juntas, e hicimos de todo un poco.

— Eso si. – Octavia suspiró pero sonrió al final – Las voy a extrañar.

— Eso te pasa por irte y abandonarnos.

— ¡Oye!. – la castaña golpeó a su hermana mayor haciéndola reír – Yo no las abandone.

— Si lo hiciste Tavi.

— ¡Tía Jess!. – las dos mujeres frente a Octavia comenzaron a reír viendo como la castaña sólo se cruzaba de brazos – Esto es una total injusticia.

— Realmente no lo es, sabes que te amamos. – Alyssa besó la mejilla de su hermana quien la miro mal – Te amamos y te vamos a extrañar.

— Y yo a ustedes, espero que pasen rápido esos dos meses.

Del otro lado del continente, Logan estaba entrando a la empresa Dragomir. Su padre pedía su presencia y podía imaginar que era sobre Octavia, la cosa estaba en ¿Sería bueno o malo aquello?, pronto lo descubriría. Cuando estuvo por fin en la oficina de su padre, vio al hombre mayor bebiendo lo que seguramente era Whisky, estaba sentando en su silla de cuero negro mirando algo en su computadora.

— ¿Pasa algo?. – preguntó el ojiazul mientras se detenía frente al escritorio de su padre.

— Octavia salió hace dos horas de Miami, se dirige hacia acá, Logan.

— ¿A qué hora llega?

— Ocho de la mañana, a esa hora te quiero en el aeropuerto mañana.

— Esta bien ¿Algo más?

— Sin falta, Logan.

Octavia suspiró al salir del aeropuerto internacional de Kiev, el frío tan conocido de la capital de Ucrania estaba golpeando la cara de la castaña y desordenando ligeramente su cabello, pero aún así, no podía compararlo con New York. El vuelo había sido bastante largo y ella adoraba estar ya en tierra firme. Apenas encendió su celular comenzaron a llegar todas las notificaciones y mensajes, principalmente de Melissa y Adelice donde avisaban que Logan había estado preguntando por ella. Algo que ya sabía pues al cambiar de celular en New York, ella las llamó y ambas decidieron colocarla al tanto de todo. Octavia estaba agradecida de que fuera domingo, podía descansar tranquila hasta el día siguiente antes de ir a sus clases y el martes si no mal recordaba tenía que ir al hospital.