Cuando a Stefan Dunant se le metía algo en la cabeza, no había poder humano que lo hiciera retractarse de ello. Así que ahí estaba ahora, planeando la elaboración de su propio vino y para eso tendría al mejor equipo ene se terreno.
Aarón, uno de los Catadores más importantes de New York, y amigo de Stefan, le facilito el nombre de Alex Parker, dueña de una hacienda en la parte norte de México y que cosechaba una de las mejores Vid.
-Si tu ideal es crear un vino de excelente calidad, te recomiendo visites a Parker, su Vid es de lo más cotizada, pero tiene tan mal carácter que no suele venderle a cualquiera.
Así había empezado todo, si le pidieran a ella definir un momento preciso en el tiempo que la hubiera puesto en la posición en la que ahora se encontraba, seria este.
Mientras Stefan se dedicaba a hacer los arreglos necesarios para echar su proyecto a andar, Monique se quedó a cargo de la empresa propiedad de su amigo.
Las cosas estaban resultando a pedir de boca, su vida continuaba como siempre, trabajo, trabajo y más trabajo. Sus días de salir con cuanto hombre se le pusiese enfrente habían terminado, no que ella ahora fuese una monja, pero se había vuelto un poco más selectiva. Ahora por lo menos salía un par de veces más con el mismo hombre. La verdad es que ella pronto perdía el interés.
Cuando Stefan regreso a Capri, le comunico a Monique que ya tenía a la persona ideal para iniciar su nueva empresa, lejos estaban los dos de que ese sencillo acontecimiento les cambiaría la vida para siempre.
-Quiero una cita con Alex Parker – le había dicho Stefan a Monique. Y esta eficiente como siempre así lo hizo.
Después de arreglar algunos asuntos en Capri y con la empresa, Stefan dejo a Monique de nueva cuenta a cargo de todo, y partió con rumbo a la Hacienda las ilusiones.
Monique y Stefan mantenían una comunicación muy fluida que, para agrado de Stefan ponía celosa a la mujer que había decidido que fuera para él.
-Monique – había soltado de forma melosa, en una de las ocasiones en que le había llamado.
-Dime
-Gracias por tu ayuda, tu apoyo y la confianza que siempre me has brindado.
-No hay nada que agradecer, para ese me pagas y muy bien – bromeo intentando mitigar un poco la tensión de Stefan – además soy tu amiga y te quiero.
-Yo también te quiero y no sé qué haría sin ti – sonrió.
Por su parte Monique, que ya estaba al tanto de lo importante que Alex Parker se había vuelto en la vida de Stefan, sonrió y le siguió el juego.
Mientras Stefan intentaba conquistar a Alex Parker, Monique dudaba si contarle los acontecimientos que se estaban desarrollando en Capri.
Al hotel habían llegaron los padres de Stefan, acompañados de Hannah Spencer, una ex amante temporal de su amigo, que se decía embarazada de Stefan.
La mujer era en verdad arrogante, presuntuosa y hasta altanera con la misma Monique y sobre todo con el personal del hotel, la situación con ella se estaba poniendo insostenible, eso sin contar la de mentiras con que llenaba la cabeza de los padres de su amigo.
Monique debía tomar una decisión y debía hacerlo pronto, así que después de una de las múltiples peleas que tuvo con Hannah, no lo pensó mucho tiempo y se dijo que debía contar personalmente a Stefan sobre la situación que se estaba viviendo en casa.
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BRUNO & MONIQUE
RomanceCuando su jefe y amigo Stefan Dunant se empeñó en cosechar su propio vino, Monique Caruso jamás se imaginó que esa nueva aventura de Stefan le traería a ella consecuencias y mucho menos de las del tipo que después de nueve meses llorando toda la noc...