Por Amor Al Arte

-Chicos, ¿Que piensan sobre Vincent Van Gogh?- preguntó la maestra de historia a sus estudiantes.

-Que era un idiota, digo, ¿quién se cortaría la oreja por probarle algo a alguien?- contestó uno de los chicos que se sentaban hasta atrás.

-¿Pero serás imbécil? Que todavía no se sabe con exactitud como fué- habló otra chica.

-Bueno chicos, calmados todos que rápido se alteran. Mayden, tu eres de los primeros que habla cuando el arte es el tema, ¿algunas palabras que gustes añadir?- preguntó nuevamente la maestra.

-Si maestra, si. Aún no se sabe con exactitud que fué. ¿Amor? ¿Un intento de mostrar su valentía? El punto es que era un artistazo- comentó el castaño como si fuera lo más obvio de mundo.

-Es cierto Mayden, Van Gogh era un excelente artista. Bueno, llendo un poco más atrás en el tiempo, al Renacimiento ¿En que ayudó la familia Médicis al arte?- preguntó la maestra, esperando que nadie diera una respuesta estúpida, como la que estaba por venir.

-Maestra, ¿pero los Médicis no eran simplemente gente del gobierno?- volvió a contestar el chico de atrás, provocando que la profesora rodara los ojos exageradamente.

-Los Médicis fueron los que albergaron a Miguel Ángel en su patio para que pudiera hacer sus obras, ¿verdad?- dudó un poco Natalia, quién sorprendió a la maestra ya que, comúnmente ella era la menos interesada en la clase en general.

-¿Natalia contestando algo en la clase? Todo un milagro- respondió sarcástico, Mayden- cuidado y no se te vayan a quemar las neuronas por tanto pensar- sonrió antipático luego de soltar el comentario. Uno de sus mayores problemas era ese, no sabía medir sus palabras y luego se arrepentia. Su menor lo miró mal y luego rodó los ojos, ella era conocida por ser del grupo que menos estaba pendiente a clases. En realidad, las apariencias engañan por que, aunque nunca contestaba en clase, tenía excelentes calificaciones.

-Realmente eres un imbécil- escupió Natalia con odio mirando mal al castaño.

-¡Ya!- gritó la maestra antes de que Mayden pudiera contestar el comentario de Natalia- Sí, Natalia, los Médicis albergaron a Miguel Ángel para que hiciera sus obras. Y Mayden, los comentarios innecesarios se evitan, igual tu, Natalia- Contestó y regañó a ambos estudiantes. La profesora siguió con su clase como de costumbre, anunciando los trabajos que tendrían de ahora en adelante, todo iba tan bien hasta que informó sobre un trabajo en duos sobre arte- Yo haré los dúos, y no habrán "pero's"- advirtió la maestra y comenzó a hacer las duplas- Mayden y Natalia, juntos- informó ella, viendo a ambos chicos quejarse.

-¡Uy! ¡Pero que cliché!- vaciló Natalia rodando los ojos.

-Los del consejo de maestros me dijeron que tenían que arreglar sus diferencias, y a mi me gusta ver el mundo arder- dijo la maestra sonriendo victoriosa, los demás hicieron una buya.

-Me rehúso- comentó Mayden.

-Lo voy a matar de aquí a que tengamos que entregar el trabajo- rodó los ojos con hastío, Natalia.

-Pelean como gatos y perros, por favor, esto no es "ring" de boxeo- rió la maestra, junto a los demás estudiantes. Era completamente cierto, se la pasaban peleando a cada rato, en las clases, en el almuerzo, en los pasillos. Obviamente no eran peleas físicas, si no, verbales, las cuales siempre terminaban en un simple ruedo de ojos por ambas partes. Para ellos era divertido, ya era como una rutina en cierto modo.

-¿Y si lo hago sola?- preguntó Natalia.

-Apoyo su idea- interrumpió a la maestra antes de hablar, Mayden.