O1.

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Jeon Jungkook, era la chica más tierna de la escuela, o por lo menos eso era lo que todos pensaban.

Con sus dientes de conejo hacía que cualquiera muriera por un ataque de ternura. Era inteligente, pero era un poco floja. Había veces en las que se quedaba dormida en clase y cuando se despertaba sus cabellos que cubrían sus perforaciones estuvieran por todos lados y su rostro se tornaba de tonalidad rosa. Era algo tierno de ver. Pero igual era (o trataba de ser) aplicada y estudiaba lo suficiente como para recuperar las clases perdidas por su sueño. Al ser una alumna tranquila y divertida era amada por sus profesores y compañeros.

Excepto por alguien.

Park Jimin.

La pequeña chica castaña no pasaba a la pelinegra de perforaciones. Le resultaba falsa. Sentía que ocultaba algo y que simplemente trataba de ocultarlo con su fachada de niña tierna.
Jimin no estaba conforme con los tratos especiales hacia Jungkook así que decidió estudiarla por una semana para tratar de descubrir que era eso que la hacia diferente a las demás.

En esa semana pudo darse cuenta de muchas cosas.

Jungkook dormía casi en todas sus clases pero aún así sabía los temas a la hora de prácticas. Amaba usar buzos con capucha y jeans rasgados.
También utilizaba shorts o faldas que dejaban ver sus largas y torneadas piernas. No usaba maquillaje y se veía radiante.

Era muy bonita, tenía que admitirlo.

Descubrió también que tenía un brazo tatuado.
Eran rosas con tinta negra las que adornaban su brazo izquierdo. Ya que era zurda. Eso también estaba apuntado en las cosas nuevas que sabía sobre Jungkook.

Otra de ellas era que casi todos los chicos de la escuela morían por ella.

Todos los días le llovían citas y cartas en pegadas en su casillero. Pero ella siempre las rechazaba o tiraba a la basura excepto los regalos que fueran algún chocolate o postre.

Descubrí también que comía mucho, demasiado.

No se como tenía un bonito cuerpo si comía por montones y todo era snacks o chatarra.

La había observado de lunes a jueves, pero hasta ahora no tenía ninguna idea de como era su personalidad ya que no había interactuado con ella.

Tampoco era que deseara aquello, pero era por mi investigación, si.

Pero eso lo resolvió la profesora Collins el día viernes.

—Park y Jeon, señoritas a ustedes les toca el tema 3–Dictó la profesora mientras miraba su lista.—Ustedes exponen el día lunes, son mis mejores alumnas así que espero y hagan bien su proyecto.

Y claro que lo haríamos.

—Podemos hacerlo en mi casa—Dijo Jungkook de pie enfrente mío mientras llevaba su mano hacia su cabello para moverlo hacia atrás aunque su lacio cabello castaño volvía como abanico al lado de su rostro.—¿Jimin?

—Oh si—Balbucee sonrojándome.

¿Me había quedado mirándola?

Mierda, ahora pareceré retrasada.

—¿Me escuchaste?—Preguntó con un deje de diversión en sus ojos.

—No—Murmuré.

—Rió suavemente mordiendo la esquina de su labio.—Haremos el trabajo en mi casa.

Poso su mano sobre la mía apartándola de mi libreta. Agarro una pluma y apunto su dirección firmando como -Jk ♡.

—Nos vemos en mi casa a las cinco—Sonrió y desapareció por la puerta.

★JUST A LITLLE CURIOUS® KOOKMIN ★Donde viven las historias. Descúbrelo ahora